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El jefe de la administración militar en Irak y director de la Oficina de Reconstrucción y Ayuda Humanitaria (ORAH), el general Jay Garner, pronto volverá a Washington, dice el diario Washington Post. Garner era la máxima autoridad estadounidense en Irak. Pero con la reciente designación de Paul Bremer como nuevo jefe interino, Garner tendrá que hacer las valijas. La ORAH confirmó ayer el regreso a Washington de Barbara Bodine, que actuó como alcaldesa de Bagdad. Su tarea era restablecer el agua y la electricidad y formar un gobierno municipal, dos cosas que no consiguió. El regreso de Garner representa una derrota del secretario de Defensa Donald Rumsfeld frente al secretario de Estado Colin Powell. Garner era un hombre de Rumsfeld, mientras que Bremer es un favorito de Powell. Fuentes citadas por el Post dijeron que, a fin de mes, “una maquinaria muy diferente” regirá Irak.