El Partido Popular expulsó ayer al ex vicepresidente del gobierno español y ex director gerente del FMI Rodrigo Rato, por el escándalo destapado por el uso de tarjetas emitidas por los bancos Caja Madrid y Bankia, entidades financieras españolas que presidió Rato, y a las que se cargaron millonarios gastos personales no declarados. Presionado por Rajoy, Rato pidió la semana pasada la suspensión temporaria del partido, hasta que se esclarecieran los hechos por los que fue imputado por la Justicia y por los se le impuso una fianza de tres millones de euros en concepto de responsabilidad civil. El juez de la Audiencia Nacional que instruye el caso acusa a Rato y a su antecesor en Caja Madrid, Miguel Blesa, de un delito continuado de administración desleal y de consentir, aceptar y propiciar el uso indebido de fondos de los bancos con tarjetas B.