El gobierno español aprobó ayer pedir al Tribunal Constitucional que suspenda la creación de un departamento de Asuntos Exteriores por parte del gobierno regional catalán, en el marco de un recurso para impugnarlo por un conflicto de competencias. El ejecutivo conservador español ha tomado esta decisión al considerar que ese departamento excede las competencias que tienen los gobiernos regionales en España, informó el ministro de Justicia español, Rafael Catalá, en una rueda de prensa tras el semanal consejo de ministros. “Aun considerando las competencias que tiene cualquier gobierno autonómico, en este caso la Generalitat de Cataluña para organizar su ejecutivo, lo cierto es que la competencia para las relaciones internacionales es exclusiva del Estado’’, dijo Catalá. El ministro español insistió en que este departamento es contrario a lo que marca la Constitución.