La fiscalía retiró ayer los cargos contra los tres últimos policías aún bajo proceso por la muerte del joven negro Freddie Gray en Baltimore, debido al “sesgo” que se impone cuando “la policía hace de policía consigo misma”, y el candidato presidencial republicano, Donald Trump, se mostró complacido. Con la denuncia de que la causa estaba “sesgada”, los fiscales desistieron de imponer cargos criminales a seis policías por la muerte de Gray, un joven de 25 años que falleció en 2015, después de una semana en coma por las graves lesiones sufridas mientras era trasladado en un furgón policial. “Las probabilidades de condena eran pésimas”, dijo Mosby, al recordar que el juez encargado del caso, Barry Williams, había absuelto ya a otros tres policías que afrontaban cargos peores: Brian Rice, Edward Nero y Caesar Goodson.

La fiscal general de Baltimore, Marlyn Mosby había prometido hacer justicia en lo que considera un “homicidio” de Gray a consecuencia de la negligencia de los policías, pero ayer su oficina anunció que retiraba los cargos contra los agentes Garrett Miller, William Porter y Alicia White, que iban a ser juzgados este año por el suceso.