EL MUNDO
Entrada japonesa en Irak
Un destacamento de 50 soldados japoneses llegó ayer a una base holandesa en Samawa, en el sur de Irak. Se trata del primer contingente nipón desplegado en el extranjero desde la Segunda Guerra Mundial. Por otra parte, un soldado estadounidense murió a causa de una explosión de un artefacto colocado en la carretera a 30 km al sur de Bagdad. En paralelo, el príncipe Carlos, hijo de la reina Isabel II, efectuó una visita sorpresa de unas horas a Irak para pasar revista a las tropas británicas y reunirse con los responsables locales.