EL MUNDO
Al compás del tamboril
JUAN M. ABAL MEDINA*.
“Llegar a las mayorías”
“Es la muestra de cómo a partir de un trabajo de construcción sólido se puede llegar a las mayorías nacionales. Se revalida la experiencia frentista en base a un trabajo de articulación dentro de una cierta amplitud ideológica, que permitió procesar las diferencias en unidad, mirando al centro pero parados claramente desde la izquierda. A diferencia del PT, que emprendió un camino más solitario para hacer alianzas recién cerca de las elecciones, el Frente viene trabajando en esa amplitud desde hace mucho, por lo que me atrevo a decir que la gestión podría llegar a ser más sencilla en términos internos. El último elemento a destacar es la paciencia, de años y años de trabajo, para llegar no de cualquier manera sino con una fuerza sólida y políticamente madura.”
* Politólogo.
MARTIN SABBATELLA*.
“No ceder a los atajos”
“La importancia de la asunción trasciende las fronteras y augura un destino distinto para Latinoamérica. Tabaré tiene el enorme desafío de demostrar que es posible gobernar en forma eficiente apoyado en la coherencia que tuvo el Frente desde 1971. Aun cuando ninguna experiencia política es exportable, porque cada país y cada sociedad tienen sus propias características, el proceso de la centroizquierda uruguaya merece ser atendido por quienes queremos construir espacios políticos alternativos capaces de enfrentar la lógica de los partidos tradicionales y representar con dignidad a los sectores más postergados de la población. Para nosotros es un ejemplo la capacidad que tuvo la izquierda democrática de Uruguay para procesar sus diferencias en unidad, privilegiar la búsqueda de consensos y no ceder ante atajos que terminan alejando a los dirigentes de los principios y los sueños que les dieron origen.”
* Intendente de Morón.
FRANCO CASTIGLIONI *.
“Desafíos en continuidad”
“El Frente incluye reformistas, socialistas, comunistas y organizaciones nacionales y populares, donde cada uno mantiene su identidad y su autonomía. Tabaré mostró ser un hombre de mediaciones, sin ser un líder carismático y sin prometer una gestión fundacional. No anunció grandes paquetes: marcó una serie de desafíos en la continuidad. Esto no debe sorprender, pero tampoco debería contribuir a tapar bajo la alfombra algunas cuestiones serias: la desigualdad, la falta de transparencia en el funcionamiento de los bancos y la cuestión de la memoria. Estos desafíos encierran uno más grande: qué perfil de país está imaginando el nuevo Presidente teniendo en cuenta la dimensión, la población y los recursos con que cuenta. Es una oportunidad notable para potenciar la inserción económica de Uruguay, lo cual requiere enfrentar la propia tentación alencierro nacionalista. Uruguay puede cumplir dentro del Mercosur un papel como centro de institucionalización y su Presidente cuenta con los rasgos para eso. Es notoria la buena gestión demostrada por el Frente, y al mismo tiempo los riesgos que enfrenta derivan de su propia fuerza política. Allí el papel de dirección y mediación de Tabaré será clave, el equilibrio entre la tentación de no enfrentar los conflictos y el riesgo de diluir la novedad en el tiempo.”
* Politólogo.
EDUARDO MACALUSE*.
“Una disputa cultural”
“La asunción de Tabaré significa un paso histórico importante para Latinoamérica. Es para festejar. Pero esto no implica trasladar la experiencia de un país a otro. Uruguay tiene una conciencia cívica importante y una historia de prácticas de tolerancia muy arraigada. Aunque hay aprendizajes comunes, en la Argentina el proceso no se va a dar juntando cabezas de distintos proyectos por el solo hecho de que se digan progresistas, como pretenden algunos intentando copiar la experiencia uruguaya. La experiencia acá de juntar cabezas ya se hizo y no funcionó. No es cuestión de crear un aparato con más gente que el PJ sino de generar en la ciudadanía un cambio más profundo. Es una disputa cultural, y en éste sí se puede decir que los desafíos de la izquierda argentina se parecen mucho al camino del Frente Amplio.”
* Diputado del ARI.
NICOLAS CASULLO*.
“Marca una nueva época”
“La asunción de Tabaré en Uruguay marca una nueva época en Latinoamérica, donde aparece una izquierda, a la que yo no llamaría necesariamente nueva izquierda, o centroizquierda o socialdemocracia, pero que es una izquierda que se acomoda lo mejor que puede, medio descosida, en tránsito de reformular sus apreciaciones, en una época que en muchos aspectos no la favorece. En este sentido creo que el Frente Amplio va a cumplir las generales de la ley en cuanto a los intentos de adaptación a estas nuevas realidades y en cuanto a una moderación que, al menos en principio, debería ser bien recibida.”
* Sociólogo.
EDUARDO DUHALDE*.
“Una cultura distinta”
“Se nota una madurez muy grande en la dirigencia política en general, cosa que en otros lugares no sucede, por ejemplo en nuestro país. La dirigencia tiene un respeto, una altura, expresando sus ideas, no agraviándose. Unejemplo es que se puede ver a los ex presidentes uruguayos en la rambla tomando un café tranquilamente. Aunque muchos de ellos hoy están mal con la opinión pública, son respetados de todos modos. Hay una cultura política distinta.”
* Ex presidente.
JORGE RIVAS*.
“Está claro qué representa”
“Es una experiencia de gestión de izquierda que va a dar una demostración de cómo se puede gobernar siendo consecuente con lo que se piensa y lo que se siente, sin resignar principios, y al mismo tiempo sin incurrir en irracionalidades o sobreactuaciones. El discurso de Tabaré fue firme, pero mesurado. No tiene necesidad de sobreactuar nada porque está claro lo que representa. Y esto es posible porque el Frente es un ejemplo de construcción política, que debe ser tenido en cuenta en países como el nuestro, donde hay tanta fragmentación del campo popular y de la izquierda democrática.”
* Diputado socialista.