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La policía y las agencias de seguridad que investigan las bombas de Londres tratan de determinar la exacta identidad de un africano del norte herido en los ataques. El hombre, del que se cree que es oriundo de Marruecos y de unos casi 30 años, fue herido en la explosión que destruyó el ómnibus, que mató a trece personas.
Se cree que el africano llegó a Londres después de haber viajado por varios países de Europa, incluyendo Francia. Las fuentes de seguridad dijeron anoche que lo que se sabe de esta persona no muestra que es buscado por ningún delito en ese país. Sin embargo, se piensa que es “conocido” por la policía en el continente, aunque no queda claro si es por actividades políticas o de delincuencia pura. Los investigadores creen que un conocimiento detallado de los que murieron y fueron heridos en el ataque es el único modo de establecer si los atacantes o sus cómplices fueron golpeados por la explosión antes de escapar. Prestan particular atención al estallido del autobús, con la posibilidad de que la bomba explotó accidentalmente.
Las fuerzas de seguridad remarcaron, por otra parte, que no hay nada que sugiera que fue un ataque suicida. Advierten que existe la posibilidad de que la persona con la bomba murió en el micro y también la posibilidad de que dejaran el bolso con el explosivo y se fueran.

* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.