EL MUNDO › LOS SUPUESTOS VUELOS Y TRASLADOS ILEGALES DE PRESOS
Diez países siguen el rastro de la CIA
Lo que empezó como un dolor de cabeza para Washington, ayer se convirtió en una pesadilla cuando siete países más se sumaron a la controversia por los presuntos aviones de la CIA que, desde 2001, trasladan ilegalmente prisioneros utilizando aeropuertos extranjeros como puntos de abastecimiento. La lista de países involucrados, que ahora asciende a diez, incluye a Suecia, Hungría, España, Italia, Rumania, Polonia, Alemania, Marruecos, Noruega y Dinamarca. La mayoría de ellos ha comenzado a investigar los supuestos vuelos e inclusive, como en el caso de Noruega, ha demandado explicaciones directamente a la Casa Blanca.
En España, donde se gestó la controversia en primer lugar, el caso se reavivó cuando se reveló que los diez vuelos que hicieron paradas en Palma de Mallorca (Baleares), también aterrizaron, al menos una vez, en Ibiza y otras cuatro veces en el aeropuerto Reina Sofía de Tenerife (Islas Canarias), según los datos confirmados por las autoridades aeroportuarias. Los partidos nacionalistas del País Vasco y de Galicia, responsables de los ejecutivos regionales balear y canario, reclamaron ayer toda la información existente sobre este asunto. El gobierno español decidió entonces que su ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, informe en el Congreso sobre el supuesto uso de aeropuerto españoles por aviones contratados por la CIA la semana que viene. Asimismo, también analizarán que comparezcan los ministros de Interior, José Antonio Alonso, de Defensa, José Bono, y el director del Centro Nacional de Inteligencia, Alberto Sáiz. Asimismo, Alonso intentó ayer bajar el tono de las denuncias: “Vamos a tener prudencia y a no sacar las cosas de quicio y a dejar que funcionen las instituciones”.
Mientras tanto, en Noruega el gobierno anunció “una reunión con el embajador estadounidense para determinar las circunstancias” en que aterrizó en Oslo en julio pasado un presunto avión de la CIA. En Suecia, al menos dos aviones-cárcel de la CIA aterrizaron en 2005 y 2002, uno de ellos con destino a Guantánamo. En Marruecos, en tanto, el semanario Le Journal afirmó el sábado que un ex agente de inteligencia local participó en un programa de “subcontratación” de tortura de la CIA, y que aviones alquilados por esa agencia realizaron al menos diez vuelos a Marruecos entre diciembre de 2002 y febrero de 2005. Finalmente, en Dinamarca, el diario Copenhagen Post aseguró que, según ONG de derechos humanos, se han registrados vuelos de la CIA sobre el país desde el 2001 y, a principios de este año, uno llegó a aterrizar en la capital.