Otra vez no pudo ser la foto entre Mauricio Macri y Sergio Massa. Las razones de la nueva postergación difieren según quién las cuente. Desde la gestión PRO aseguran que el encuentro pautado para ayer se suspendió por diferencias sobre los temas a tratar, una de las condiciones que impuso Macri para “no hacer sociales” en el encuentro en Casa Rosada. En cambio, desde el gobierno nacional desdramatizan la postergación y la atribuyen a problemas de agenda de Massa por la crisis en Bolivia. “Estamos recibiendo a todos los gobernadores, ¿para qué preocuparse tanto por un jefe municipal?”, lo ninguneaban con ganas al líder de PRO. La novela de la reunión entre el jefe de Gobierno y el jefe de Gabinete ya va por su tercer capítulo y promete más.

La semana pasada Massa anunció que se iba a reunir con Macri, luego de haber conversado por teléfono con el Jefe. Atrás parecían quedar los reclamos del líder de PRO con los que le cerró la puerta al primer encuentro que le propuso el jefe de Gabinete. “Sentarse por sentarse no vale la pena. No queremos que sea una reunión más, queremos hablar con una agenda acordada, algo concreto. Estamos para trabajar, no para hacer sociales”, se había quejado Macri al rechazar la primera oferta.

Massa no le respondió públicamente, sino que habilitó interlocutores para concretar la reunión. El jefe de Gabinete porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y el secretario de Gestión Pública, Juan Manuel Abal Medina, comenzaron a intercambiar borradores de la “agenda acordada” que pedía Macri. Massa incluso habló por teléfono con el jefe de Gobierno durante no menos de media hora. Finalmente, anunció que se reunirían.

Sin embargo, la entrevista primero se postergó para las 18 de ayer y luego se canceló. En el gobierno nacional aclararon que “no hay mala voluntad para llevar adelante la agenda”. Incluso, aseguraron que hoy estará la nueva fecha del encuentro.

Desde el macrismo, sostuvieron que se suspendió por “diferencias” en torno a los puntos de la agenda. “La reunión se pospuso y no hay nueva fecha”, sentenciaron cerca de Larreta. En el gobierno nacional, en cambio, sostuvieron que la reunión no se hizo porque se suspendió el viaje a Bolivia de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, lo que requirió la atención de Massa. Los kirchneristas se mostraban confiados en que el encuentro se hará a fines de esta semana o a comienzos de la que viene. “Es un encuentro igual que con el resto de los gobernadores: no hay un orden del día. Eso no existe. Lo único que hay es un listado de los temas a tratar en común”, aseguraron a PáginaI12. Sin embargo, admitieron que ese temario no estaba cerrado.

Quizá fue el único punto en el que coincidieron con los macristas: en que no hay consenso. “Mauricio no quiere tratar una extensa lista de temas, pero sí un reducido grupo de puntos muy importantes para los vecinos”, aseguraban desde la gestión PRO y acusaban al gobierno nacional de no querer incluir algunos temas en la discusión. Entre las obras públicas que proponen discutir los macristas está la continuación del entubamiento del arroyo Maldonado, el soterramiento del ferrocarril Sarmiento, el financiamiento de la Autopista Ribereña y de la red de subtes, el reclamo por los terrenos del Onabe y por el traspaso de la policía con los recursos, un punto en el que difícilmente haya coincidencias.