En su primera visita al Congreso, el jefe de Gabinete, Sergio Massa, deberá lidiar ante los legisladores con dos temas que incomodan al gobierno nacional: la situación inflacionaria con las críticas al Indec y el culebrón que se ventila en Miami sobre el valijero venezolano Antonini Wilson. Massa inaugurará el próximo miércoles un nuevo sistema, acordado entre el kirchnerismo y la oposición, para los informes que el ministro coordinador rinde al Parlamento, que consiste en la elección de tres temas sobre los que deberá responder, tanto a las preguntas que se realicen por escrito y en forma anticipada como a las repreguntas de los diputados en el recinto. Dos de los ejes son elegidos por la oposición y el restante por el oficialismo, que esta vez le pidió al jefe de ministros que responda sobre el financiamiento externo. El oficialismo accedió al viejo reclamo opositor con la venia del propio Massa, que incluso envió al vicejefe de su cartera, el socialista Oscar González, a participar de la reunión en las que se selló con la firma de un acta en la Cámara de Diputados.