Lunes, 8 de diciembre de 2008 | Hoy
Greenpeace hizo su propio balance de Mauricio Macri con un videojuego dedicado a parodiar la campaña de “Jugá limpio”, que lanzó el jefe de Gobierno. Allí se lo ve a Macri intentando –con poco éxito– embocar papelitos en un tacho de basura. Luego va con un camión hasta la Ceamse y vuelca una tonelada de desperdicios sobre dos bonaerenses con remeras de Boca. Uno muere y su espíritu se va al cielo; el otro perece por la contaminación. El video termina con un anuncio “Game over. Macri wins”. Se puede ver si se introduce en el navegador el siguiente choclo: www.greenpeace.org/argentina/contaminaci-n/basta-de-basura/macri-no-juega-limpio.
El debate por la expropiación de Aerolíneas Argentinas ocultó el resultado del habitual maratón legislativo de fin de año en la Cámara de Diputados. La Cámara baja también aprobó unos 500 proyectos –de leyes, declaraciones y resoluciones– sin “disidencias ni observaciones” en las que diputados de distintas bancadas trabajaron durante todo el año parlamentario. Aunque también dieron el visto bueno a algunas propuestas del Ejecutivo. Entre ellas, varias relacionadas con acuerdos bilaterales de distinto tipo con los gobiernos de Israel, Sudáfrica, Guyana, Portugal e Italia. Hubo uno que llamó la atención por su curioso enunciado: el convenio marco suscripto con Ucrania, un acuerdo de “cooperación en los usos pacíficos del espacio ultraterrestre, incluso la Luna y otros cuerpos celestes”. Ningún legislador conocía el proyecto ni mucho menos podía explicar los motivos y alcances del pacto entre ambos Estados. La lectura del acuerdo arrojó algo de luz: los dos países son miembros del “régimen de control de tecnología misilística”.
Julio Cobos hizo de su pasión aeróbica una forma de hacer política. Pero la vida deportiva también le trajo más de un dolor de cabeza: no encuentra custodio que le siga el ritmo. En sus tiempos de gobernador de Mendoza no había personal de seguridad que quisiera acompañarlo en sus recorridas. Un día, al poco tiempo de haber entrado con el auto oficial en la gobernación, escuchó un ruido muy fuerte proveniente de la cochera. A uno de sus custodios se le había escapado un disparo. “¿Qué pasó? ¿Cómo puede ser que se la haya escapado un tiro?”, inquirió Cobos al responsable de la seguridad. La explicación venía por el lado del deporte. Como no había personal que lo acompañara en sus maratones, buscaron una persona a la que le gustara correr. El detalle es que el joven de 23 años no tenía mucha experiencia como custodio.
Transcurría entre aplausos la entrega de distinciones del Partido Socialista por los 25 años de la democracia, cuando se hizo un silencio, muchos fruncieron el ceño y empezaron a murmurar. Fue cuando uno de los homenajeados, el ex titular de la CTA Víctor De Gennaro, mencionó el apellido “Basteiro” como uno de los compañeros con los que militaba. A muchos les costó entender que se trataba del dirigente aeronáutico Favio Basteiro y no del socialista K Ariel Basteiro, cuya mención parece estar prohibida en el PS.
El jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, estuvo en la inauguración de una de las salas de casamiento que lanzó el gobierno porteño como parte del programa “Sí, quiero”, diseñado por la esposa de Larreta, Bárbara Diez, que trabaja casualmente como “wedding planner”. “Yo me casé acá, ¿qué te parece?”, comentaba Larreta en el CGP 14, de Palermo, al que asistieron el modisto Gino Bogani y la modelo Ingrid Grudke. La sala cuenta con un pantalla de plasma para ver la cara de los novios mientras pronuncian sus votos, con máquinas expendedoras de arroz y equipos de aire acondicionado. El conjunto parece una explosión de leche (hasta las butacas son blancas) en la que se destaca el corazón violeta que representa el programa.
“Hemos recaudado 43 mil pesos”, decía sonriente el presidente del Instituto Moisés Lebensohn, escuela de formación de dirigentes creada por la Juventud Radical y la Franja Morada. Entre las 300 personas que lo aplaudieron en el tradicional restaurante Lalín estaban los presidentes de los bloques legislativos de la UCR, el senador Ernesto Sanz y el diputado Oscar Aguad. Legisladores, ex funcionarios y dirigentes partidarios –como Facundo Suárez Lastra y Enrique Nosiglia (ver foto)– aprovecharon la cena para conversar sobre la situación del partido y las elecciones del año próximo. Y como muestra de la reunificación en curso, se pudo ver en una misma mesa al lopezmurphysta Marcelo Meis y al telermanista Alejandro Rabinovich, entre otros legisladores porteños. La situación se puso tensa cuando asomó por esa zona el titular del instituto, Hernán Rossi, que hacía poco había elaborado un lapidario informe sobre la actividad de la Legislatura de la ciudad: según sus conclusiones, se trata de un cuerpo casi meramente declarativo, con bajo promedio de trabajo y muy pocos proyectos de ley presentados. Rossi no se quedó mucho tiempo en la mesa y la incomodidad apenas duró algunos bocados.
Alejado definitivamente del kirchnerismo, el diputado Felipe Solá ya participa sin problemas de charlas y paneles junto a dirigentes de la oposición. El sábado se sentó al lado del titular del PRO bonaerense, Jorge Macri, en unas jornadas de Pensamiento Político organizadas por la Fundación Konrad Adenauer y la Asociación Civil de Estudios Populares. “La Argentina, más que nunca, necesita de manera imperiosa la generación de espacios de debate y discusión política, de los que podamos participar varios sectores políticos, sin la necesidad de hacerlo bajo las especulaciones electorales que puedan despertarse por una foto en los medios”, aseguró Macri, desde la ciudad de Mar del Plata. Horas más tarde, su equipo de prensa enviaba a los medios las fotos del acto junto al ex gobernador.
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