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Cristina Fernández de Kirchner insistió en la necesidad de “seguir profundizando el modelo” y se mostró convencida de no dar “ni un paso atrás” en las conquistas obtenidas, durante un acto que encabezó ayer en la ciudad de La Plata, en el que anunció importantes obras para la capital bonaerense.

“Si alguien hubiese anticipado que iba a reestructurar la deuda externa y desembarazarse del Fondo que nos controlaba, hubieran dicho que se trataba de promesas de campaña”, destacó la Presidenta. “Nadie hubiera creído en 2003 que en seis años de gobierno el índice de desocupación bajaría del 25 por ciento a menos de dos cifras, aun en el marco de esta crisis internacional”, resaltó.

Acompañada por el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, el intendente local, Pablo Bruera, y el ministro del Interior, Florencio Randazzo, Fernández de Kirchner se emocionó al pedir ayuda para “seguir saliendo de este infierno”.

“En nombre de todas las cosas en las que siempre creí y del compromiso que siempre tuve desde muy joven, podrán decir o hacerme las cosas más terribles, pero no voy a dar ni un paso atrás en todas las conquistas que hemos conseguido”, aseguró conmovida.

Durante el acto, en el que anunció inversiones en infraestructura por 60 millones de pesos para La Plata, la Presidenta no se privó de apuntar a la oposición: “Es muy difícil todo cuando hay que enfrentar intereses minoritarios, hay que pagar costos”.

En la misma sintonía, el gobernador Daniel Scioli insistió en la importancia de “no dejar este proyecto a mitad de camino”, y destacó “el esfuerzo extraordinario de la Presidenta para que la crisis internacional no haga estragos aquí”.

“Necesitamos que nos acompañen y respalden este trabajo integrado entre la Nación y la provincia, porque lo estamos haciendo para el bien de la Argentina”, enfatizó Scioli.

Otro tema presente en el discurso de la Presidenta fue el de la inseguridad. Al respecto, reclamó a toda la sociedad que cumpla su parte en la prevención del delito, con “conductas que castiguen fuertemente a aquellos que se ponen fuera de la ley”.

Fernández de Kirchner hizo referencia al reciente intento de robo del auto de la custodia de su hija Florencia, y reveló que los criminales utilizaron una camioneta que sus dueños habían entregado a reducidores para estafar al seguro del vehículo. “Es necesario –dijo al respecto– para combatir la inseguridad, el compromiso de todos: no solamente de las autoridades y las instituciones, sino también de los ciudadanos y ciudadanas, para no permitir comportamientos de esta naturaleza que muchas veces se vuelven comunes.”

“Con esto no busco eludir la responsabilidad –explicó–, porque quienes estamos en el más alto nivel tenemos la más alta responsabilidad, pero todos desde el lugar en que estemos tenemos que contribuir.”