[cerrar]

Comparta esta nota con un amigo

E-Mail de su amigo
Su nombre
Su E-Mail

La última semana de campaña en el territorio bonaerense no es apta para paranoicos. A las denuncias de un “pacto oculto” entre el kirchnerismo y Unión-PRO realizada por los candidatos del Acuerdo Cívico y Social, se les suman ahora las de Francisco de Narváez, que contraatacó con la idea de que hay un acuerdo entre Néstor Kirchner y Elisa Carrió. En algo así como un ojo por ojo, luego de que lo acusaran de que el PJ volverá juntarse después del 28, el peronista disidente retrucó con la misma moneda: “Se están cruzando elogios de una forma jamás vista. El gobernador Scioli, que está haciendo de candidato, ayer (por el domingo) estuvo hablando maravillas de Margarita Stolbizer y de la gestión del radicalismo en la provincia, no es una circunstancia casual”, aseguró De Narváez.

Con las denuncias de operaciones cruzadas entre los principales espacios de la provincia de Buenos Aires, De Narváez apeló a una vieja estrategia: la mejor defensa es un buen ataque. Así respondió a los intentos que desde la semana pasada vienen realizando tanto la UCR como la Coalición Cívica por romper con la polarización que muestran las encuestas de opinión entre el oficialismo y Unión-PRO.

El empresario colombiano se agarró de los dichos de Scioli el domingo pasado para justificar su análisis. “A veces hay una subestimación del radicalismo y a mí me consta. No sólo está gobernando 40 municipios; Margarita es una dirigente de talla y Ricardo Alfonsín es un hombre respetado”, había afirmado el gobernador a una radio porteña.

A raíz de esas declaraciones, De Narváez consideró que Kirchner y Carrió, “que expresan la vieja y la mala política, están articulando en las últimas horas una campaña para instalar esto”. El empresario colombiano dijo que ambas fuerzas se pusieron de acuerdo para “detener el cambio” que expresaría Unión-PRO. “Si hay un acuerdo, es entre Kirchner y Carrió, es la resistencia de una forma de hacer política: de descalificar, de agraviar en lugar de resolver los problemas de la gente”, completó el empresario colombiano y vaticinó que esta semana se va a ver “potenciada” esta situación “porque se sienten perdidos”.

En tanto, Mauricio Macri también salió a desmentir alguna vinculación con el oficialismo. “Hay más chances que me haga hincha de River que de sentarme a cogobernar la Argentina con Kirchner”, ironizó el jefe de Gobierno porteño.

Desde el espacio panradical salieron rápidamente al cruce de De Narváez. Carrió respondió tajante las acusaciones del candidato de Unión-PRO: “No negocio con una banda de delincuentes”. La chaqueña paró cualquier especulación al respecto y llamó a votar “una fuerza alternativa. Que pueda ser gobierno en 2011 y cambiar la matriz del saqueo”. “No convence a nadie”, sentenció el jefe del bloque de diputados de la Coalición Cívica, Adrián Pérez, que consideró la denuncia como “un intento desesperado de generar una polarización que no existe en realidad porque lo que hay es un final abierto entre tres candidaturas”.

El diputado dijo que las palabras de De Narváez le parecen “una apreciación muy graciosa”, porque el electorado sabe que la CC “fue casi la única fuerza opositora al kirchnerismo” en los últimos años. Consultado por los motivos de los elogios de Scioli a Stolbizer, Pérez admitió que “es probable que en esto un sector del Gobierno tenga su visión, que le convenga que no haya polarización y que haya división en tres”.

Las acusaciones cruzadas de uno y otro espacio se producen en medio del fuerte protagonismo que tomaron las encuestas de opinión en los últimos días. La aparición de algunos sondeos que ubican a De Narváez por encima de Kirchner fueron denunciados por los dirigentes del panradicalismo como una operación de marketing para que el voto opositor se concentrara en la boleta de Unión-PRO.

Los candidatos del Acuerdo Cívico y Social vienen machacando con que el peronismo disidente es una “falsa opción” y que no es un opción “real” al kirchnerismo. De esta manera buscan romper con el llamado “voto útil” que alimenta De Narváez en sus numerosos spots publicitarios: “Si no nos dividimos, lo hacemos”.