Aunque muchos reivindicaron su rebeldía frente a la decisión presidencial de removerlo del Banco Central, ya casi no hay legisladores opositores que estén dispuestos a seguir sosteniéndole la mano a Martín Redrado. Sin embargo, las principales bancadas de la oposición –UCR, CC, PJ disidente, PRO y PS– volverán a juntarse mañana para evaluar una “autoconvocatoria” del Congreso si el Ejecutivo desestima el pedido de convocar a sesiones extraordinarias para aprobar o rechazar los DNU que dieron origen a la creación del Fondo del Bicentenario, para pagar vencimientos de deuda con reservas, y la remoción del presidente del Central por negarse a implementar dicho fondo. Pero ahora, el principal obstáculo pasa por garantizar el quórum en ambas Cámaras legislativas después de que las diferencias políticas sobre el pago de la deuda dividieran al entramado opositor en el Parlamento.

“Yo no puedo hacer recomendaciones a nadie. Pero yo, en lugar de Redrado, renunciaría. Una vez que estuviera a salvo el tema de las reservas, convocaría a una conferencia de prensa y renunciaría”, afirmó el diputado radical Ricardo Alfonsín. “Hay una forma digna de irse: que lo llame una comisión del Parlamento y haga allí su descargo. Hecho su descargo, ya no tiene sentido que siga, porque hay una cuestión de liderazgo que no está”, propuso el peronista disidente Felipe Solá.

Las coincidencias no fueron más allá de buscarle una salida elegante a Redrado. Alfonsín dijo que el DNU de remoción de Redrado “es opinable”, y que “habría sido preferible un decreto normal para que se reúnan las comisiones y conozcan bien los fundamentos que justifican la decisión”. Solá, en cambio, defendió el abroquelamiento del banquero y aseguró que su “valor” es que “simboliza la independencia del Banco Central respecto del Estado, que es lo que los ‘fondos buitre’ (que piden embargos sobre la deuda) intentan probar que no existe”.

En tanto, el presidente de la Cámara baja, el kirchnerista Eduardo Fellner, también se sumó a las críticas del oficialismo a Redrado, que todavía se sostiene en el cargo por una decisión judicial. “Con su posición tan caprichosa como inexplicable, salvo que uno asuma que defiende intereses que no está revelando, Redrado complica irresponsablemente la situación institucional, política y económica del país”, sostuvo Fellner a través de un comunicado. Sin embargo, el diputado jujeño no hace referencia en el texto al pedido que, a través suyo, las principales bancadas opositoras le hicieron a la Presidenta para que convoque a sesiones extraordinarias para tratar los DNU.

Este será el principal eje del encuentro que reunirá mañana a la oposición en Diputados. Radicales, cívicos, peronistas disidentes, macristas y socialistas insisten en la necesidad de “autoconvocar al Congreso” si el Gobierno desestima su propuesta. “Sería mejor que se hiciera un tratamiento en sesiones extraordinarias, pero si no las convoca, nosotros nos vamos a autoconvocar, es la lógica. Es parte de las facultades implícitas del Congreso”, indicó Alfonsín y aseguró que en esa reunión los bloques opositores fijarán “cuánto tiempo esperaremos” la respuesta del Ejecutivo. Aunque el vicepresidente primero de la Cámara baja dijo no tener “ningún temor a la negociación (con el oficialismo), porque se trata de dialogar”.

El conglomerado opositor también sacará cuentas, después de que once diputados de centroizquierda, encabezados por Fernando “Pino” Solanas, afirmaron que no participarán de ninguna autoconvocatoria “si la misma no incorpora al temario la discusión sobre la legitimidad de la deuda externa”. Lo que dejó a la oposición con los números muy ajustados para lograr quórum propio en la Cámara baja.

“Si el Congreso ya votó las partidas para pagar la deuda, eso es un retroceso y un desconocimiento de la legitimidad que tiene la decisión del Congreso en la asignación de los recursos”, dijo la diputada del GEN, Margarita Stolbizer, sobre el planteo de Solanas. El propio cineasta salió al cruce de los opositores que criticaron su postura: “Ellos votaron con el oficialismo la apertura del canje de deuda en noviembre. ¿Con qué se paga? Ellos quieren más ajuste: parar el gasto público, cerrar las cuentas, pagar con eso y no tocar las reservas”.