A pesar del anuncio de la presidenta Cristina Fernández sobre la creación del Programa Federal de Desendeudamiento, dirigentes de la oposición confirmaron ayer que insistirán en el Senado con la iniciativa que reparte por ley los excedentes de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), estimados en 9800 millones de pesos. Muchos integrantes del arco opositor se encontraban ayer en viaje a España para participar de la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana, por lo que la definición de la estrategia opositora se concretará a su vuelta, la próxima semana, previo a la sesión del miércoles. Desde el oficialismo, el santacruceño Nicolás Fernández aseguró que el proyecto opositor “no tiene ningún sentido” luego de la medida adelantada del Poder Ejecutivo.

Fuentes de la UCR y del peronismo federal advirtieron que hasta ayer su intención era tratar el dictamen firmado por los opositores Gerardo Morales, Ernesto Sanz, Roy Nikish, Pablo Verani, Laura Montero, José María Roldán (UCR); Juan Carlos Romero, Adolfo Rodríguez Saá, Carlos Menem, Carlos Reutemann (PJ disidente); María Eugenia Estenssoro (Coalición Cívica) y por último el pampeano Carlos Verna. La oposición había logrado unificar sus múltiples proyectos en base al del senador Verna y consiguió emitir dictamen el 15 de abril en las comisiones de Coparticipación Federal y Presupuesto y Hacienda.

Para insistir con este proyecto, los opositores ratificaron que existen diferencias “sustanciales” con el anunciado por la Presidenta. En primer término, la iniciativa parlamentaria cancela parte de las deudas provinciales, mientras suspende las retenciones de la coparticipación que efectúa la Nación a las provincias para el pago de sus deudas. En cambio, la propuesta del Gobierno fija una refinanciación de los vencimientos de las deudas, los posterga por un año y medio y reduce la tasa de interés al 6 por ciento fijo anual, al tiempo que prorroga los vencimientos por 20 años. Otra diferencia es que los fondos ATN se usarían para cubrir los vencimientos que las provincias no paguen en 2010 y 2011. El proyecto de Verna establece el giro automático a las provincias –anterior a los 60 días de terminado el período anual– de los fondos excedentes de los ATN no repartidos. Todavía se desconoce si el Ejecutivo implementará el Programa Federal de Desendeudamiento mediante un DNU, un decreto simple o si lo enviará al Congreso. De todas formas, dirigentes de la oposición resaltaban la necesidad de que se sancione una ley y no un DNU.

Con el anuncio oficial, los opositores ven fracasar sus intenciones de capitalizar lo que se mostraba como una posible derrota parlamentaria del oficialismo. Por ese motivo insisten en tratar el tema en el recinto para mostrar una victoria contundente, algo que no han podido lograr en lo que va del año. Cuando se acerque la sesión del próximo miércoles, se contarán los votos y se resolverá si finalmente el tema se somete a consideración.

“El proyecto que quiere tratar la oposición tiene serios problemas de constitucionalidad”, aseguró el senador Fernández, en diálogo con Página/12.

Para el santacruceño, se trata de una ley que requiere una mayoría calificada como establece el artículo 75, inciso 2, de la Constitución. El legislador agregó además que la iniciativa de la Presidenta “tiene el respaldo del 70 por ciento de los gobernadores”, por lo que no habría necesidad de que se sancione el proyecto opositor.

Verna, que en la última sesión protagonizó un duro cruce con Morales, todavía no se pronunció. En aquel momento, el radical lo acusó de haber vendido su voto por 600 millones de pesos que el Ejecutivo enviaría a su provincia.

El apoyo del senador pampeano, la semana pasada, al proyecto de utilización de reservas del Banco Central para el pago de deuda, le valió a la oposición una importante derrota, tras meses de batallar en contra del pago. Después del discurso del radical, la endeble articulación opositora que mantenía vivas las posibilidades de vencer al oficialismo quedó en una situación crítica.