Lunes, 9 de agosto de 2010 | Hoy
EL PAíS › DIFERENCIAS ENTRE LOS PRECANDIDATOS DEL PERONISMO DISIDENTE
Después de que el jefe de Gobierno porteño destacara “la actitud frentista del PRO”, el gobernador Das Neves salió a descartar el ingreso de Macri en el justicialismo por ser “un hombre claramente identificado con la derecha”.
El peronismo disidente busca acomodarse de cara a las elecciones del año que viene, pero resulta complicado. “Macri es un hombre claramente identificado con la derecha; por eso que se involucre con el justicialismo es casi imposible”, aseguró ayer el gobernador de Chubut, Mario Das Neves, competidor por la precandidatura presidencial que enfrentaría, desde el justicialismo, al candidato que presente el kirchnerismo. A pesar de su procesamiento judicial, el jefe de Gobierno porteño no deja caer sus intenciones presidencialistas y se volvió a mostrar cercano a la entente díscola del PJ, al declarar que no descarta “una actitud frentista” y que “dentro del PRO” había “muchos peronistas”.
Con la mira puesta en el año electoral que se avecina, los dirigentes que se nuclean en el peronismo no kirchnerista están a los codazos para posicionarse a la cabeza del espacio político. En ese contexto, el gobernador de Chubut, Mario Das Neves, saltó al cuello del jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, cuando éste insinuó un posible frente común del PRO con el peronismo díscolo. “Macri es un hombre claramente identificado con la derecha, lo que está expresado en sus acciones”, y advirtió que por su tinte ideológico “es casi imposible que se involucre con el justicialismo”.
Macri había realizado declaraciones mientras concretaba una viaje por Salta, en claro acercamiento al peronismo disidente provincial que encabeza el senador y ex gobernador Juan Carlos Romero. Allí dijo que su fuerza política nunca había “descartado la actitud frentista” y, por lo tanto, una posible alianza, ya que “lo importante es que la gente apoye y que haya un buen programa de gobierno. Y el PRO tiene ambas cosas”.
La idea de conformar un espacio común de base peronista para enfrentar al kirchnerismo da vueltas desde el momento en que De Narváez le ganó por escaso margen la elección legislativa hace dos años al ex presidente Néstor Kirchner. Desde entonces y hasta ahora, pocos son los avances logrados, ya que las disputas entre los distintos dirigentes para conducir el posible armado electoral pesan más que la intención de estructurar una alianza concreta. La semana pasada se reunieron el ex presidente Eduardo Duhalde, Macri, el diputado Francisco de Narváez, el senador Carlos Reutemann y el diputado Felipe Solá junto al CEO del multimedios de Clarín, Héctor Magnetto. Pero en ese grupo de quienes apuestan a pelear por la presidencia por el peronismo también se anotó el gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, quien al igual que Das Neves ya lanzó su candidatura con afiches y propaganda en las calles.
El ex presidente Eduardo Duhalde creó el Movimiento Productivo Argentino para convocar a los dirigentes peronistas que fueran quedando al margen del armado presidencial. El ex gobernador de Entre Ríos, Jorge Busti, es uno de los aliados más leales de Duhalde, por lo que en territorio entrerriano pasa a jugar de local. En ese sentido es que el ex gobernador bonaerense convocó a una nueva reunión a los dirigentes en Paraná para la primera semana de septiembre, algo que irritó a más de uno. El propio Das Neves advirtió que no se va a “respetar” el pretendido liderazgo que Duhalde quiere mostrar dentro del peronismo anti K. De Narváez y Solá también anunciaron que no asistirán al convite de Paraná aunque, ante la falta de consenso, Duhalde invitó mañana a los dirigentes justicialistas a resolver el dilema en el despacho del puntano Adolfo Rodríguez Saá.
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