El encargado de Negocios de Irán, Alí Pakdaman, desmintió ayer que el ex agregado cultural de Teherán en la Argentina Mohsen Rabbani haya viajado a Brasil. “Lo desmiento categóricamente. El señor Rabbani no salió a ningún lado. Está en Irán. Es otra de las mentiras mediáticas cuyo único objetivo es presionar al gobierno argentino”, señaló Pakdaman.

La versión de que Rabbani está en Brasil, con documentos falsos, fue hecha pública por el fiscal del caso AMIA, Alberto Nisman, quien dijo que está estudiando si le pide a Interpol que investigue el presunto viaje de Rabbani a Brasil. La revista brasileña Veja, además, publicó el fin de semana un informe especial sobre la supuesta presencia en ese país de agentes de la red Al Qaida y que, en ese sentido, Rabbani saldría desde Irán con dirección a Brasil. También consignó que un hermano de Rabbani viviría en Brasil y que viajaría a Irán con militantes islámicos para recibir adoctrinamiento ideológico y formación militar, presuntamente de cara a futuros atentados terroristas en el Mundial de Fútbol 2014 y los Juegos Olímpicos 2016.

Rabbani era consejero cultural de la embajada iraní en Buenos Aires en julio de 1994 cuando estalló la bomba que demolió la sede de la AMIA, causando 85 muertos. Entre otras cosas, fue acusado de la supuesta compra de la camioneta Trafic que terminó cargada con los explosivos y usada como coche-bomba para el ataque. Por ello sobre Rabbani pende un “alerta roja” de captura de Interpol, junto al ex presidente de Irán entre 1989 y 1997 Alí Akbar Hashemi Rafsanjani; el ex ministro de Información y Seguridad hasta 1997 Alí Fallahjan; el ex ministro de Relaciones Exteriores de Irán Alí Akbar Velayati y el ex comandante de la Guardia Revolucionaria Moshen Rezai.