“Tenemos que sumar. Vamos a tener una mirada generosa con todos los que quieran acompañar la candidatura de Alfonsín”, sostuvo ayer el diputado radical Ricardo Gil Lavedra, ante la consulta de Página/12 sobre un entendimiento con el PRO para colocar una lista de adhesión a la candidatura presidencial de Ricardo Alfonsín en la Ciudad de Buenos Aires. Por la mañana Alfonsín intentó desmentir las conversaciones, pero se limitó a descartar una alianza con Mauricio Macri a nivel nacional. “Yo no descalifico al que piensa diferente, pero tenemos posiciones distintas, más allá de que en algunos temas encontramos consensos”, aseguró. Los radicales no descartan un acuerdo “distrital” y están a la espera de una definición del jefe de Gobierno, que hasta ahora se inclinaba por llevar una boleta corta, como sucedió en 2007.

Tal como informó este diario, el lunes hubo un encuentro entre el jefe de la bancada del PRO, Federico Pinedo, y su par de la UCR, Gil Lavedra. En esa reunión no lograron avances respecto de las elecciones de octubre porque en el macrismo hay una fuerte discusión en relación con la estrategia nacional. “No hemos considerado la posibilidad de apoyar a Alfonsín, ni estábamos en tratativas. Espero que el fin de semana tengamos claro hacia dónde vamos”, sostuvo Pinedo, quien había recibido la instrucción de Macri de no avanzar para evitar cualquier repercusión negativa en la elección porteña.

“Mauricio quiere ir con boleta corta, es un suicidio político, una responsabilidad y un despropósito”, sentenció un dirigente de la mesa chica del PRO. Entre Jorge Triacca, Pablo Walter, Paula Bertol y Gabriela Michetti están tratando de convencerlo para “darle un cauce a la gente que quedó colgada” en el resto del país. El jefe del PRO debería resolver, como dijo Pinedo, este fin de semana. El miércoles próximo vence el plazo para presentar alianzas. Casualmente ayer Alfonsín evitó usar el término “límite” para referirse al PRO, que tanto irritó al jefe de Gobierno.