EL PAíS
El PJ porteño quedó sin candidato y a la deriva
Se bajó Scioli. Se corre Lavagna. Ibarra adelantó los plazos. El peronismo perdió sus garantes de unidad y no sabe cómo seguir.
Por Santiago Rodríguez
El PJ porteño se quedó hace menos de diez días sin su candidato a jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, cuando Daniel Scioli decidió disputar la vicepresidencia junto a Néstor Kirchner, y ahora está a punto de perder por el camino a la única figura que podía salvarle los papeles: el ministro de Economía, Roberto Lavagna, tiene prácticamente resuelto no dar pelea en el plano local porque la convocatoria a elecciones en el distrito para el próximo 8 de junio no le da mucho tiempo para instalar su candidatura y lo obligaría a abandonar el Palacio de Hacienda en las próximas semanas. El no de Lavagna deja de los peronistas a la deriva.
“Nos estamos exprimiendo el bocho. La verdad que la jugada que hizo (Aníbal) Ibarra al adelantar las elecciones fue inteligentísima. Obliga a los posibles candidatos a definir si juegan en la nacional o en la ciudad y acentúa la polarización entre él y (Mauricio) Macri”, admitió un alto funcionario de la administración duhaldista a Página/12 y con resignación aseguró que “lo de Roberto (por Lavagna) no va”.
El escenario planteado por el jefe de Gobierno porteño con su decisión de acelerar el proceso electoral en la ciudad deja casi fuera de juego al ministro de Economía. Los peronistas porteños fueron en busca de Lavagna la semana pasada, una vez que Scioli los dejó librados a su suerte para acompañar a Kirchner en la fórmula presidencial. La operación la piloteó el presidente del PJ en el distrito y jefe de la Side, Miguel Angel Toma, y el titular del Palacio de Hacienda no rechazó la propuesta.
La condición que Lavagna puso para aceptar el ofrecimiento de Toma fue permanecer como ministro de la transición hasta el próximo 25 de mayo y recién después lanzar su candidatura, algo que ahora ya no es posible: Lavagna es el funcionario con mejor imagen del Gobierno, pero aun así necesita tiempo para posicionarse como candidato. Para las elecciones en la ciudad faltan poco más de tres meses y, por lo tanto, debería abandonar Economía antes de lo previsto. “Lavagna quería ser candidato si la elección fuera más adelante y no va ahora a dejar el ministerio. Está el tema de la transición de por medio y tiene mucha presión del Fondo”, confiaron en la Casa Rosada.
Fracasado el intento de llevar a Lavagna como candidato, los peronistas están todavía más perdidos que el día en que se quedaron sin Scioli. Las listas para diputados nacionales y legisladores locales están definidas, pero no tienen ningún reemplazo para la Jefatura de Gobierno.
“Es algo así como un tren fantasma. Una cosa era integrar las listas hace diez días y otra ahora. Sin Scioli ni Lavagna en la parte superior de la boleta, se vuelve al peronismo del dos o tres por ciento”, destacó a este diario un peronista que dejó el partido tiempo atrás y hace poco se acercó a colaborar con los hombres de Kirchner en la ciudad que respaldan la candidatura de Rafael Bielsa para la Jefatura de Gobierno.
Quienes acompañan a Bielsa pretenden capitalizar la falta de candidato de los peronistas. “Hubo ofrecimientos y no los descartamos, pero nos genera mucho problema con los menemistas y nuestra intención es preservar el espacio que articulamos”, contó uno de los artífices del acuerdo que selló la unidad del PJ porteño y reveló que también están explorando otras alternativas: “Macri le pidió a (Ramón) Puerta que hiciera una gestión y operadores suyos, como Horacio Rodríguez Larreta, están en contacto y por otro lado el colorado (Diego) Santilli es el nexo con la gente de Ibarra”.