El partido Unión Popular anunció que el ex presidente Eduardo Duhalde –quien compitió como su candidato presidencial en octubre pasado– ya no pertenece más a esa fuerza. Además, otros dirigentes que habían llegado junto a él, como Miguel Angel Toma, Julio César Aráoz y Antonio Arcuri, directamente fueron expulsados. “Hemos logrado sacar a estos inescrupulosos”, se congratuló el titular de Unión Popular, Luis Fernández.

La noticia corrió por cuenta de la apoderada de UP, Graciela Devita, quien confirmó la separación de Duhalde. En marzo de 2010, la UP acordó con el ex presidente facilitarle los medios legales para competir en las elecciones primarias y en las generales de 2011. “El convenio fue un acuerdo de palabra, que además suscribió algunos lineamientos informales por las cuales Duhalde se comprometió a retirarse del partido apenas finalizaran las elecciones”, se explicó.

Duhalde protagonizó un “papelón” –así lo definió– junto a Alberto Rodríguez Saá cuando no pudieron ponerse de acuerdo para realizar una preinterna escalonada, que terminó con denuncias cruzadas de fraude. Así las cosas, cada uno fue candidato por las suyas. Duhalde, como candidato de la Unión Popular, con el ex gobernador de Chubut Mario Das Neves como compañero de fórmula, terminó quinto, con el 5,86 por ciento de los votos.

Lo llamativo de ayer fueron las declaraciones del titular de UP, quien dio a entender que quisieron arrebatarle el partido. “Como presidente del partido quiero decir que estamos muy agradecidos a nuestra apoderada Graciela Devita por apoyarnos para desbaratar todas las operaciones del duhaldismo y haber llevado este expediente en la Justicia Electoral con todo éxito”, afirmó Fernández. “Fue gracias a su habilidad profesional y a una Justicia Federal representada por el juzgado de la doctora Servini de Cubría, que se ajustó estrictamente a derecho, que hemos logrado sacar a estos inescrupulosos y devolver el partido a nuestra dirigencia tradicional, que obró con total buena fe y que hoy disfruta este triunfo merecido”, concluyó Fernández.