La presidenta Cristina Kirchner repasó ayer con el vicepresidente chino, Li Yuanchao, el estado de las relaciones bilaterales –cruciales para la economía argentina–, firmaron cuatro nuevos acuerdos de cooperación y un Tratado de Extradición. Li Yuanchao, que mantuvo una agenda cargada que incluyó un almuerzo con su par Amado Boudou, encuentros con empresarios y reuniones en el Congreso, ratificó el respaldo de su país a los reclamos argentinos por la soberanía sobre las Islas Malvinas.

El encuentro se realizó en el despacho presidencial de la Casa de Gobierno, en el marco de la visita oficial que Li Yuanchao inició ayer a la Argentina y que se extenderá hasta el domingo cuando partirá hacia Caracas para continuar con su gira latinoamericana de presentación. La Asamblea Popular Nacional de China eligió oficialmente la nueva conducción del país que ahora preside Xi Jinping en marzo pasado.

La audiencia duró casi dos horas. Alrededor de la mesa se sentaron el canciller Héctor Timerman, los ministros de Agricultura, Norberto Yauhar, de Industria, Débora Giorgi, de Planificación, Julio De Vido, y los secretarios de Política Económica, Axel Kicillof, de Comercio Interior, Guillermo Moreno, y de Obras Públicas, José López. En tanto, acompañaron al vicepresidente chino los viceministros de Relaciones Exteriores, Jun Zhai, de Cooperación Internacional, Fengxiang Chen, de Comercio, Chao Wang, el vicedirector de la Oficina de Estudios de Políticas, Yiting He, y el embajador de China en la Argentina, Hengmin Yib.

Li Yuanchao habló en el brindis previo al almuerzo con que lo agasajó Boudou en el Palacio San Martín. “Argentina es un mercado emergente que en los últimos años, bajo la conducción de la presidenta Cristina Kirchner, logró importantes éxitos en su desarrollo y un rol creciente en el contexto internacional”, elogió. Consideró su visita como un paso importante en el plan de ambos países de impulsar un acuerdo de asociación estratégica. “Traigo la voluntad política de impulsar la cooperación de Argentina y China”, aseguró y enumeró las coincidencias alcanzadas en cuanto a “reforzar el intercambio de alto nivel político para una mutua confianza”.

Por su parte, Boudou se encargó de agradecer “profundamente” el permanente respaldo de China a los reclamos argentinos en los foros internacionales para la apertura de un diálogo con el Reino Unido por la soberanía de las Malvinas, al tiempo que, en reciprocidad, subrayó el apoyo argentino al concepto de “una sola China”, que tiene que ver con el rechazo a los afanes independentistas de Taiwan. “Me gustaría reafirmar la fortaleza con que debemos seguir trabajando en los organismos multilaterales y el G-20 para que la nueva arquitectura económica mundial siga prestando cada vez más atención al desarrollo de la economía real y la calidad de vida de los pueblos y deje de centralizarse en el sistema financiero, como lo ha venido haciendo hasta ahora”, añadió el vicepresidente argentino.

Se firmaron cinco documentos:

- Un memorándum de cooperación en comercialización de producción agrícola a granel.

- Un protocolo de cooperación sobre los requisitos para la exportación de equinos de Argentina a China.

- Un convenio marco de asistencia técnica entre la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA y la empresa Huawei Tech Invest-ment.

- Otro convenio de asistencia técnica, pero en este caso entre la Facultad de Ingeniería de la UBA y Huawei Tech Investment.

- El Tratado de Extradición entre Argentina y China.

El vicepresidente chino pasó también por el Congreso donde se reunió con un grupo de diputados de diferentes partidos encabezados por el presidente de la Cámara, Julián Domínguez. “Esta es una década ganada en la relación entre Argentina y China”, sostuvo Domínguez. El visitante coincidió en la importancia de seguir impulsando la relación bilateral hacia la asociación estratégica. Recibió de regalo una copia de la Declaración de Ushuaia y aprovechó para reiterar el apoyo por Malvinas.

Yuanchao también visitó ayer la planta de biogénesis de la firma Bagó, en Garín, y se reunió con el presidente de la empresa SanCor, Oscar Carreras, quien le entregó el primer envase de leche maternizada que la firma comenzará a venderle a China.