Martes, 29 de octubre de 2013 | Hoy
EL PAíS › EMPEZó LA PELEA > EL FIN DEL ¿ACUERDO?
El jefe de Gobierno porteño buscó limitar la proyección de su competidor en la carrera presidencial. Dijo que el intendente de Tigre es parte del peronismo y que el PRO no va a admitir en su espacio integrantes de los últimos gabinetes nacionales. Massa criticó a Macri por hablar de 2015, pero señaló que buscará “extender el mensaje” fuera de la provincia de Buenos Aires.
“La gente” fue el comodín que mostró el diputado electo por el Frente Renovador Sergio Massa en cada una de sus muchas apariciones mediáticas durante la mañana de ayer. Acudió a la figura cuando le preguntaron por el resultado de las elecciones del último domingo, por el Frente para la Victoria y por la relación aparentemente rota entre su espacio y el PRO, cuyo referente, el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, ya se postuló para competir en la disputa presidencial en 2015. En ese sentido, Massa consideró que los que se candidatean para el Ejecutivo “le faltan el respeto a la gente”, pero su entorno ya lo puso en carrera.
“La gente quiere dirigentes comprometidos con la agenda de problemas cotidianos”, opinó Massa en uno de los tantos diálogos radiales que mantuvo con la prensa ayer por la mañana, tras la victoria que el Frente Renovador obtuvo en la provincia de Buenos Aires, en donde le sacó más de 10 puntos de ventaja al Frente para la Victoria. En entrevistas concedidas a Radio Mitre y TN, en donde le pidieron opinión sobre cómo el oficialismo había reaccionado frente al panorama de los resultados, el diputado electo bonaerense sostuvo que “más allá de cómo pasaron el momento ayer, lo importante es lo que hagan a partir de hoy en la gestión. En ese sentido, pido con humildad escuchar a la gente, que ayer (por el domingo) habló y fue muy firme respecto del mensaje en lo que tiene que ver con temas como inflación e inseguridad, un mensaje muy negativo a los fracasos de (el secretario de Comercio Interior, Guillermo) Moreno en materia económica”.
Massa, no obstante, evitó hablar sobre la construcción del Frente Renovador con la mira puesta en 2015 y aprovechó la ocasión para desmarcarse del PRO. “Los que piensan en 2015 le faltan el respeto a la gente”, afirmó en clara referencia a Macri, cuyo discurso de cierre eleccionario giró en torno de su postulación como “alternativa” para ocupar el sillón de Rivadavia: “Se le falta el respeto a la señora que no sabe si los precios de hoy van a ser los mismos del viernes, al laburante que se levantó a las 6 de la mañana y tiene miedo cuando espera el colectivo”, ejemplificó.
Sin embargo, algunos personajes de su entorno se atrevieron a más. Es el caso del ex jefe de Gabinete Alberto Fernández, quien se permitió imaginar un protagonismo de Massa en la contienda presidencial: “Hay algunos datos interesantes. El primer dato es que Sergio Massa, alguien que hace dos meses era una incógnita, hoy está parado en el centro de la escena nacional como un candidato de futuro”, enfatizó. El jefe comunal de San Miguel, Joaquín de la Torre, fue menos directo y habló de “reproducir la construcción”. “Lo que va a hacer Massa es tratar con todos nosotros a su lado para que esta construcción se pueda ir reproduciendo en distintas provincias de la República Argentina”, analizó. A través de un comunicado, el intendente de San Martín, Gabriel Katopodis, celebró el triunfo y aseguró que el espacio tiene “la responsabilidad para construir un futuro mejor”. “La gente decidió cambiar las cosas con su voto y ahora tenemos que ponernos a trabajar en ese sentido, porque este triunfo nos afirma el compromiso de ocuparnos de la agenda de los problemas reales”, aseguró.
Por su parte, Massa reclamó “una mirada de largo plazo, pero en políticas públicas, en infraestructura, transporte, economía, producción, empresa, campo e industria, pero no en proyectos personales” porque “la gente está harta de los proyectos personales y de las discusiones banales de los dirigentes”, adivinó. Al respecto, mencionó que “en la provincia de Buenos Aires, la sanción de la ley de policías municipales y el cambio del código de procedimientos no puede esperar”.
Massa dijo que “no” tuvo contacto con “el entorno” de la presidenta Cristina Fernández y que “no” tiene información sobre el estado de salud de la mandataria y pidió trabajar para “consolidar algunos liderazgos locales nuevos”, como los de Berisso y Quilmes, donde el Frente Renovador ganó tras unas primarias “con un poco menos de volumen” electoral. Entonces se le preguntó si esperaba traspasos desde el oficialismo tras la derrota: “Ganamos en más de cien distritos, y el día que lanzamos el Frente Renovador éramos veinte intendentes. Quiero tomarme el trabajo, más que de andar haciendo de ambulancia, de discutir seriamente qué significa el voto de la gente. Si no, vamos a estar tirando por la borda el camino que se eligió. La gente quiere dirigentes comprometidos con la agenda cotidiana”, señaló.
“La primera diferencia respecto de 2009 –cuando el oficialismo perdió por 2,3 puntos la elección legislativa, debajo del espacio de Francisco de Narváez– es que acá hay un grupo muy grande de intendentes de la provincia (de Buenos Aires) y algunos intendentes amigos de otros rincones del país, que tienen ganas de trabajar y que tienen por objetivo acompañar la labor parlamentaria”, explicó Massa en radio La Red para diferenciar su triunfo del que consiguió Francisco de Narváez hace cuatro años. En ese sentido, aseguró que buscará “avanzar en una agenda con intendentes del Frente Renovador” y “extender el mensaje” fuera de la provincia de Buenos Aires. El intendente de Tigre contó que el domingo mantuvo comunicaciones con Mario “Das Neves, Ramón Mestre y el intendente de Catamarca” y que “el miércoles empezamos una gira por Mar del Plata y Bahía Blanca agradeciéndole a la gente que nos votó”.
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