EL PAíS › VILMA RIPOLL, CANDIDATA DE IZQUIERDA UNIDA
“Romper con el sectarismo”
Recién vuelve de acompañar a los trabajadores del subte en su reclamo por las seis horas laborales y después de la entrevista con Página/12 se irá rápidamente a otra reunión en el Ministerio de Trabajo. Transforma un vaso de agua en una breve pausa y enseguida comienza a contar su enojo con Ibarra porque “no baja” de su despacho. Vilma Ripoll, la enfermera candidata de Izquierda Unida a gobernar la ciudad, hace tres años que ocupa un lugar en la Legislatura y va por más. El 24 de agosto también encabezará la lista de legisladores desde donde aspira a renovar su banca. “Hay que romper con el sectarismo. Es un grave error no entender la necesidad de iniciar caminos de unidad”, afirma algo enojada por no haber logrado ningún acuerdo con los otros sectores de la izquierda porteña.
–¿Qué balance hace de estos años en la Legislatura?
–Nuestra gran preocupación era cómo trasladar los reclamos de los sectores populares al recinto y, al mismo tiempo, continuar acompañándolos afuera. Creo que fuimos el instrumento para la concreción de muchos de los reclamos como el de las fábricas recuperadas por sus trabajadores. Yo soy autora de la primera ley de expropiación, y apoyé las siguientes. También peleamos por las seis horas de trabajo en el subte, lucha que trasladamos al recinto pero que después Ibarra vetó. Algunas concreciones tuvieron que ver con leyes y otras fueron punta de lanza para su tratamiento en las distintas secretarías, como es el caso de los medicamentos genéricos.
–¿Qué le promete a los que la voten?
–Nuestra pelea por renovar las bancas tiene que ver con fortalecer una alternativa de izquierda que es de la ciudad pero que también es del país. La posibilidad que se abrió desde el Congreso con el proyecto de Patricia Walsh por la nulidad de las leyes de impunidad, es un paso importante. La misma impunidad han tenido los grupos económicos para hacer grandes negociados. Nuestras propuestas no son electorales, son las mismas peleas que venimos dando para enfrentar a las privatizaciones, para reestatizar todos los servicios públicos, o para no pagar la deuda.
–¿No se quiere o no se puede lograr la unidad de la izquierda?
–Hemos intentado avanzar con acuerdos que permitan generar una alternativa sólida para dar pelea. Nos parece un grave error no entender que se pueden iniciar caminos de unidad. Zamora y el resto de la izquierda nos contestaron que no. Hay que romper con el sectarismo y ponernos de acuerdo en un programa político y en un criterio de unidad.
Reportaje: Martina Noailles.