Luego de que el papa Jorge Bergoglio desmintiera las versiones de que había convocado a un encuentro entre el gobierno nacional, los sindicatos y los empresarios en el Vaticano, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, se mostró preocupado por “la manipulación del nombre del Papa”. La inexistente convocatoria a “un diálogo” en la sede eclesiástica fue publicada el domingo en tapa por los diarios Perfil y La Nación. Este último insistió ayer con la versión, luego de haberse conocido la desmentida del Papa. Ayer lo negaron también la UIA, los sindicalistas a los que involucraba el rumor y el gobierno nacional.

“Es motivo de preocupación y de reflexión que medios de comunicación que atacan sistemáticamente al Gobierno, a la Presidenta o al jefe de ministros, a quien le piden la renuncia cada día, generen esta operación mediática, esta mentira que involucra a la máxima figura de la Iglesia Católica”, remarcó el jefe de Gabinete.

La versión de los dos diarios era que Bergoglio iba a encabezar un encuentro “para garantizar la paz social” al que habían aceptado asistir el ministro de Trabajo, Carlos Tomada; el presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Héctor Méndez; su vice, Daniel Funes de Rioja, y el secretario general de la Uocra, Gerardo Martínez.

El Papa desmintió esta versión en una conversación con la periodista Alicia Barrios, a quien le dijo: “No, eso no es cierto. Es un disparate”.

También lo desmintieron fuentes del Vaticano y de la Iglesia argentina. Pese a esto, La Nación publicó ayer una segunda nota en la que ratificaba la convocatoria inexistente y acusaba a “algunos medios que se hicieron eco de informaciones no confirmadas de que no había sido convocada por el Vaticano”. Ayer lo desmintieron todos los sectores involucrados: políticos, sindicalistas y empresarios, además de la impugnación del Papa.

En la versión difundida, Gerardo Martínez era uno de los que ratificaba la existencia de ese encuentro, dado que era representante de la CGT ante la OIT. El sindicalista lo negó ayer. “Eso nunca se habló, no tiene nada que ver, estoy sorprendido”, dijo el gremialista, quien pareció apuntar al dirigente de la UIA, Funes de Rioja, como el origen de la versión falsa: “Funes de Rioja es representante de empresarios del Consejo de Administración de la OIT. El me manifestó que el 19 de marzo tendríamos la posibilidad de viajar al Vaticano y eventualmente invitar a su santidad a que asista a la próxima conferencia del año que viene de la OIT, que va a ser presidida por el argentino Funes de Rioja”. Bergoglio le señaló a la periodista Barrios que no tiene prevista ninguna reunión con estas personas el mes que viene. En la versión de Martínez, es Funes de Rioja el impulsor del encuentro y no el Papa. Y, en cualquier caso, tenía fines y participantes muy distintos a los informados.

Otros representantes de la UIA también desmintieron la versión de que el Papa los había convocado. El vicepresidente de la UIA, Jorge Urtubey, afirmó que “viendo la realidad social, no amerita una suerte de mediación papal”. El vocal de la UIA, Juan Carlos Lascurain, advirtió: “Nunca fuimos convocados a ninguna reunión con el Papa”. “El Papa bastantes problemas tiene que atender como para que nos fuera a recibir a nosotros. Es una falta de respeto la nota que salió publicada”, afirmó Juan Carlos Sacco, otro de los dirigentes de la UIA.

A los empresarios y sindicalistas que hicieron fila para desmentir a La Nación y Perfil, se sumaron funcionarios del gobierno nacional, con críticas para esos medios. “Medios de prensa han expresado una supuesta cumbre con su santidad el papa Francisco en el Vaticano, y esto es un hecho que nos preocupa, porque su santidad no solamente es obispo de Roma y cabeza de la Iglesia Católica, sino también jefe del Estado vaticano, en consecuencia su rotunda y contundente desmentida acrecienta aún más un problema de desconfianza y descrédito que padecen muchos medios de comunicación de la Argentina”, advirtió Capitanich. “Nosotros consideramos que su santidad no solamente es un emblema para 1200 millones de católicos en el mundo, sino una referencia indiscutible como líder mundial”, afirmó el jefe de Gabinete, y agregó: “Es bueno pensar que no podemos usar falsamente su nombre para una operación mediática o un interés político determinado”.