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Fuentes de la Cancillería hicieron saber anoche que continúan normalmente los diálogos con Irán para avanzar en lo que tiene que ver con el Memorándum de Entendimiento firmado por la causa AMIA. Como se sabe, a Teherán se le presentó en Zurich un plan de sucesivas etapas para que en diciembre pueda viajar a la capital iraní el juez Rodolfo Canicoba Corral, el fiscal Alberto Nisman y seguramente las partes querellantes para interrogar a los cinco imputados que están abarcados por órdenes de captura con alertas rojas de Interpol.

El diario La Nación publicó el martes que existía un giro en la Cancillería marcado por tres hechos. En primer lugar, que ningún funcionario concurrió al brindis convocado el 11 de febrero por el encargado de negocios de Irán, en el Hotel Alvear, con motivo del aniversario de la Revolución Islámica. En segundo lugar, que se interrumpieron los diálogos con Irán por el memorándum. Por último, que existe un acercamiento con Israel, que enviará un importante funcionario en marzo, y que hay una negociación para comprar aviones israelíes.

Desde la Cancillería señalaron que nadie concurre al brindis anual por la Revolución Islámica desde que asumió Néstor Kirchner en 2003, aunque suponen que antes tampoco concurrían funcionarios del gobierno.

Por otro lado, en la Cancillería afirman que las negociaciones por el memorándum continúan. Como dijo en su momento el ministro Héctor Timerman a Página/12, a la Argentina le gustaría que fuera a mayor ritmo, pero a veces estas negociaciones internacionales tardan. El ejemplo que señaló el canciller es que el acuerdo entre Estados Unidos, Alemania, Rusia y las potencias centrales con Irán por la limitación a las plantas nucleares en el país persa llevó diez años. Por lo que pudo averiguar este diario, se están esperando respuestas de Teherán al plan que propuso la Argentina.

Respecto del vínculo con Israel, en la Cancillería sostienen que no se “comenzó” a hablar ahora porque nunca se dejó de hablar. Que las relaciones son las habituales e incluso Israel, desde que avanzaron las negociaciones entre Estados Unidos, sus aliados e Irán, no volvió a cuestionar el memorándum. “Hay diálogo con Israel en todos los temas. Relaciones plenas”, señalan en la Cancillería.

El diálogo con Irán por el atentado contra la AMIA ha sido dificultoso desde el principio y tal vez lo sea más ahora que Teherán llegó a un acuerdo con las grandes potencias. Antes, el gobierno persa necesitaba normalizar la situación del caso AMIA para que no se usara como argumento de una guerra en su contra y por las sanciones económicas que le aplicaban los países centrales. El conflicto bélico parece ahora más alejado y las represalias sobre los movimientos financieros iraníes tienden a relajarse.

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