La paritaria docente en la provincia de Buenos Aires pasó ayer a un nuevo cuarto intermedio, en principio para el próximo martes, esta vez por falta de acuerdo. El gobierno de Daniel Scioli propuso un aumento del 25,5 por ciento en tres tramos y el Frente Gremial Docente Bonaerense lo rechazó por considerar que es “absolutamente insuficiente”. Tampoco hubo consenso en la negociación de la Ciudad de Buenos Aires, donde también hubo un ofrecimiento del 25 por ciento en tres tramos que no fue aceptado. Seguirán conversando hoy.

Tras la fallida reunión del martes por la tarde, suspendida por una agresión, el Ejecutivo bonaerense llevó ayer a la mesa de negociación una propuesta de un aumento salarial sin esperar la pauta de la paritaria nacional en cuarto intermedio hasta la semana que viene. Ofrecieron un 25,5 por ciento en tres partes: un 14 por ciento en el sueldo de marzo (a cobrarse en abril), 5,8 con el salario de agosto y el 5,7 por ciento restante con el de noviembre.

En ese escenario, un docente de grado que recién se inicia y tiene una jornada de cuatro horas pasaría a cobrar en diciembre próximo 4522,90 pesos, cuando actualmente cobra 3604,50 por ese cargo. Con la misma lógica, un maestro que ya tiene 24 años de antigüedad y que por una jornada de cuatro horas hoy percibe 5354,90 pesos, cobraría unos 6741,20 cuando todo el aumento se vea reflejado en el salario.

El Frente Gremial –integrado por los sindicatos Suteba, UDA, AMET, FEB y Sadop– rechazó la propuesta. Los gremios hablan de un piso del 35 por ciento de aumento. Para el titular de Suteba, Roberto Baradel, la oferta es “absolutamente insuficiente” y no recompone “la pérdida de poder adquisitivo que sufrieron los docentes” en enero y febrero. En ese sentido, Baradel adelantó a Página/12 que mantienen vigentes las medidas de fuerza convocadas para los próximos 5 y 6 de marzo, a pesar de que el próximo miércoles deberían comenzar las clases en provincia. De todas formas, concurrirán a la nueva reunión a la espera de una mejora en la propuesta. Los docentes bonaerenses suman otros reclamos a los salariales. También apuntan a la mejora en la infraestructura educativa y a la regularización de las prestaciones en el IOMA, la obra social del gremio.

En principio, se prevé que la nueva reunión entre el gobierno bonaerense y los gremios docentes se realice el próximo martes. La fecha podría adelantarse para el lunes por la tarde si la negociación a nivel nacional se reanuda ese mismo día por la mañana.

Tampoco se llegó a un acuerdo en la Ciudad de Buenos Aires, donde los 17 sindicatos docentes asistieron ayer a la segunda reunión con las autoridades educativas. En el caso del gobierno porteño, la propuesta fue de una suba del 25 por ciento: 15 en marzo, 5 en junio y otro 5 por ciento en septiembre. Sin consenso, la paritaria también paso a un cuarto intermedio para hoy, en principio al mediodía, en la sede del Ministerio de Educación porteño, sobre Paseo Colón.

Los sindicatos docentes plantearon a su vez un salario inicial no inferior a los cinco mil pesos, un aumento de todas las categorías del 30 por ciento retroactivo a febrero y que ese incremento se pague en el primer semestre, junto con una cláusula de monitoreo para precisar el salario en el mes de junio. Eduardo López, secretario general de la UTE, dijo que “con esta propuesta el salario inicial quedaría en 5400 pesos recién en el mes de agosto, cuando en otras jurisdicciones como Santa Fe, Córdoba o San Luis, el salario inicial supera los 6000 pesos”.

“Es una vergüenza que en el distrito más rico del país estén ofreciendo un incremento tan bajo comparándolo con Córdoba o Santa Fe”, dijo López y añadió que en la reunión “quedó bien claro que por más que lleguemos a un acuerdo por salarios, no vamos a abandonar la lucha por la falta de vacantes en las escuelas.”