Las cinco federaciones docentes se preparan para retomar hoy la negociación paritaria con el gobierno nacional, mientras por falta de acuerdo en las paritarias provinciales, en una decena de provincias hay frentes de conflicto abiertos. El panorama más complejo es el de la provincia de Buenos Aires, donde las clases todavía no empezaron en las escuelas públicas y el Frente Gremial está en paro por tiempo indeterminado. También hay medidas de lucha en curso o anunciadas en La Rioja, Entre Ríos, Chaco y Salta.

En la paritaria nacional, según anticipó el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, el Gobierno podría acortar los plazos de la oferta que realizó para el salario inicial. Una de las alternativas en estudio es acordar el aumento de acá a diciembre, en lugar de hacerlo hasta junio del 2015, como propuso en la última reunión con los gremios.

Las negociaciones entraron en una impasse cuando el Ejecutivo ofreció un 31 por ciento de aumento hasta junio del año próximo (para éste, correspondería un 22 por ciento en tres cuotas, marzo, agosto y noviembre, más dos sumas fijas de mil pesos cada una por presentismo). Las federaciones docentes, que reclaman entre el 42 y el 61 por ciento, lo rechazaron y convocaron a un paro. El Ministerio de Trabajo dictó entonces una conciliación obligatoria, que no fue acatada por los sindicatos de docentes estatales que integran la Ctera, pero sí por los del sector privado, que pertenecen a la CGT de Antonio Caló.

El encuentro paritario de hoy será el primero que se realiza bajo la conciliación, que rige por 15 días. En el medio, los dirigentes cegetistas (los privados del Sadop, los técnicos de AMET, UDA y CEA) tuvieron un encuentro con los funcionarios y presentaron una contrapropuesta.

En esta paritaria se discute solamente el salario inicial, es decir lo que cobra un maestro que recién se inicia por un cargo de jornada simple. Actualmente ese sueldo es de 3416 pesos. Aunque en la mayoría de las provincias el piso salarial es más alto, hay ocho distritos donde los maestros sin antigüedad ganan el mínimo que se fije a nivel nacional.

Ayer, a horas de retomar la negociación, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, reclamó a los docentes que negocien sin hacer paros. “Tenemos que ser respetuosos con la educación pública, popular y gratuita, que es un derecho básico y esencial de los argentinos”, dijo al cuestionar la postergación de las clases por los reclamos salariales.

La extensión de la protesta en las escuelas públicas bonaerenses, donde todo indica que seguirá sin haber clases hasta la semana que viene, generó llamados similares de los funcionarios de la provincia. El gobernador Daniel Scioli defendió la oferta de un aumento del 30,9 por ciento a pagar en dos tramos y argumentó que en el distrito “más del 70 por ciento de los docentes tiene más de un cargo, lo que proyecta ese mínimo con una base de salario de 9500 pesos a lo largo del año”.

A su vez, el vicegobernador Gabriel Mariotto sugirió que, tomando el ejemplo de Ecuador, habría que avanzar poniendo “a la educación como un servicio público, para no alterar el régimen de estudio de los chicos”. De esta manera, se limitaría el derecho a huelga en las escuelas.

“Creo que tras superar esta coyuntura, que se va a superar como la de otros años, hay que hacer una mesa para revisar cómo vamos a abordar el tema en los años posteriores con los sindicatos, por supuesto, sentados en esa mesa”, señaló Mariotto.

En este sentido, destacó la iniciativa de Ecuador de “poner a la educación como un servicio público”, que aclaró “tiene la posibilidad del reclamo salarial pero con políticas de Estado sin alterar el régimen de estudio de los chicos”.

Los docentes, por su parte, explicaron por qué rechazaron el 30,9 de aumento. El titular de Suteba, Roberto Baradel, dijo en este sentido que si bien la propuesta de incremento salarial asciende al 30,9 por ciento para las categorías más bajas, “para otro sector es el 21 por ciento”, por lo que “la propuesta sigue siendo insuficiente”. El dirigente reclamó “más dinero” y que se acorten “más los plazos” de las cuotas.

En Entre Ríos, los maestros de Agmer rechazaron la propuesta salarial del gobierno provincial y convocaron a un nuevo paro de 72 horas a partir del lunes. La gobernación había ofrecido el 26 por ciento a pagar en marzo y agosto y un incremento fijo de 250 pesos para cargos iniciales.

Agmer hizo una contrapropuesta de un 20 por ciento en marzo y 15 por ciento en junio, devolución de los días descontados por huelga en años anteriores y blanqueo del monto en negro que se presentó en la propuesta en concepto de material didáctico. Los maestros entrerrianos ya habían realizado un paro de 72 horas en el comienzo de las clases.

En La Rioja, donde ayer se cumplió la primera jornada de una huelga de 48 horas, el Ministerio de Educación ofreció incorporar 200 pesos al sueldo básico y mantuvo el planteo de sumar 1000 pesos “en negro” a pagar entre marzo y junio. También en Salta, ayer los docentes hicieron huelga junto a los estatales de ATE, mientras que en el Chaco los maestros comenzaron un nuevo paro de 72 horas.