La presidenta Cristina Fernández de Kirchner volvió a reivindicar a su gobierno y a cuestionar al sindicalismo opositor durante un breve mensaje que dio en ocasión del Día del Trabajador. “Así se festejan los 1º de Mayo: abriendo lugares de trabajo, ni insultando ni amenazando, ni agraviando”, dijo la mandataria en una comunicación telefónica durante un acto que encabezó en el Chaco el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, para inaugurar un emprendimiento de producción y exportación de miel. Estas declaraciones se interpretaron como una respuesta a los dichos de los dirigentes Hugo y Pablo Moyano, quienes en las últimas horas habían amenazado con “muertos” en el marco de un conflicto del gremio de Camioneros con la intendencia de Quilmes y con declararle “la guerra” al gobierno nacional. Por la tarde, CFK saludó “a todos los trabajadores y trabajadoras en su día” a través de su cuenta de Twitter.

La mandataria, que había viajado el miércoles a Santa Cruz, donde permanecerá todo el fin de semana, no tenía prevista ninguna actividad en la agenda oficial, por eso sorprendió al participar del acto que encabezó Capitanich en su provincia. “Es un día muy especial, cuando Coqui me contó que el 1º de Mayo iban a inaugurar este magnífico emprendimiento, quise estar presente”, explicó, desde Río Gallegos, durante la apertura de la firma Mieles del Chaco, en la localidad de Presidencia Roque Sáenz Peña.

El emprendimiento, señaló, es consecuencia de las políticas sostenidas por el gobierno nacional “durante todos estos años, como convencer a los productores de que hay agregar mucho valor a los productos primarios” fortaleciendo el “equilibrio de la balanza comercial” y consiguiendo desarrollar sectores que antes no tenían espacio en el esquema productivo. “Hemos transformado la Argentina, porque la miel como producto nacional no era conocida hace diez años y hoy se la está colocando en los principales mercados europeos”, aseguró.

“Esto no es posible si no hay un Estado nacional, y en este caso un Estado provincial, que tuvo un protagonismo tan fuerte para lograr este emprendimiento”, agregó Fernández de Kirchner, que también pidió a los “productores, empresarios, trabajadores y gobernantes” que “sigan trabajando y produciendo, que es como la Argentina va a seguir saliendo adelante”. Por último, la mandataria pidió festejar el Día del Trabajador “abriendo lugares de trabajo; no incitando ni amenazando, ni agraviando, sino trabajando y produciendo”.

Un día antes, en el acto de inauguración de la fábrica de electrodomésticos SIAM, en Avellaneda, la mandataria había pedido a los trabajadores “cuidar lo que tienen” y criticó a los sindicatos que “hacen huelga cuando hay prácticamente plena ocupación” y las condiciones para los trabajadores son buenas. “Cuando mejor estás, te comportás mal; cuando peor estás, te portás bien. Esto lo tenemos que modificar si queremos un país diferente”, dijo, además de advertir que “a los gritos y a los golpes nadie se sienta a discutir nada”.

Esas declaraciones llegaron como una respuesta a declaraciones de los Moyano, que en los últimos días subieron la virulencia de sus palabras. El secretario adjunto de Camioneros, en un conflicto con la intendencia de Quilmes por el traspaso de la recolección de basura, había manifestado: “Si tiene que haber un muerto va a haber uno, dos, tres”, y luego amenazó de muerte al jefe comunal, Francisco Gutiérrez. Su padre Hugo, que encabezó un paro el mes pasado, dijo que su gremio está “preparado para ir a la guerra” contra el Gobierno (ver página 5).

No fue el único momento político que tuvo el acto: un rato antes, durante su discurso de inauguración de la planta, Capitanich había criticado a los opositores que atacan al Gobierno usando datos falsos “no por mala intención si no por ignorancia”. En consecuencia, el jefe de Gabinete sostuvo que “el gran esfuerzo que hay que hacer es enseñar y mostrar todo lo hecho” porque hay que “estar orgullosos de lo conquistado y defenderlo”, sostuvo.

En Twitter

“Muchísimas gracias y feliz día a todos los trabajadores y trabajadoras”, escribió Fernández de Kirchner ayer por la tarde en su cuenta de la red social del pajarito. El mensaje iba acompañado de una foto tomada un día antes junto con trabajadores de la fábrica de electrodomésticos SIAM, firma insignia de la etapa de industrialización argentina durante el primer peronismo, que reabrió las puertas de su planta de Avellaneda con un acto del que participó la Presidenta, el miércoles. La puesta en funcionamiento de este emprendimiento “crea 200 nuevos empleos” y “prevé llegar a 1000”, destacó a través de Twitter.

Además sostuvo que “el modelo industrialista” que aplicó este gobierno “es el de mayor aumento en el producto bruto industrial en toda América latina en la última década” y que es el que “mayor participación tiene en el PBI general” del país. También reiteró partes del discurso que había dado en SIAM, en el que pidió a “empresarios, trabajadores y funcionarios” que tengan “la fortaleza” y “la inteligencia” de “poder sostener este modelo”.

A través de esa red social la jefa de Estado destacó también otras obras como la ampliación de la planta de ascensores Servas, en el partido bonaerense de La Matanza, las inauguraciones de nuevas instalaciones de la firma Lactear, en la localidad cordobesa de Morteros, y la puesta en valor de un tramo del Camino de la Rivera, en Avellaneda. También destacó la entrega de viviendas en varios barrios de esa localidad del sur del conurbano y en la provincia de La Rioja, en el marco de los programas Plurianual de Construcción de Viviendas y Federal de Urbanización de Villas y Asentamientos Precarios.