[cerrar]

Comparta esta nota con un amigo

E-Mail de su amigo
Su nombre
Su E-Mail

Con una campaña basada en la crítica a la política de derechos humanos del gobierno nacional, Jorge Sobisch buscará hoy su reelección como gobernador de Neuquén. A pesar de su histórico alineamiento con Carlos Menem y de que gobierna una provincia marcada por la violencia social, las encuestas coinciden en que es el favorito para los comicios de hoy. Tiene a su favor más de cuarenta años de hegemonía de su partido, el Movimiento Popular Neuquino (MPN). Su principal adversario es el peronista Aldo Duzdevich, que cuenta con el respaldo de la Casa Rosada.
Además de gobernador, los 318 mil neuquinos habilitados elegirán hoy 35 legisladores provinciales y dos diputados nacionales. Como sucede desde hace casi cuarenta años, el partido con más chances es el MPN, el movimiento fundado por Felipe Sapag, que fue seis veces gobernador de la provincia.
Ex intendente de la Capital, Sobisch era el mejor alumno del veterano caudillo, hasta que en 1991 se distanciaron: Sapag quería imponer a su hijo Luis, pero Sobisch ganó las elecciones para gobernador, donde fue elegido nuevamente en 1999. Durante aquellos años, Sobisch construyó una buena relación con Menem, beneficiándose con algunas de sus políticas, como la privatización de YPF, que generó desocupación y miseria en amplios sectores de la provincia, pero que trajo beneficios para el gobierno en términos de regalías.
En las elecciones de hoy, Sobisch buscará su tercer mandato. Cuenta con la poderosa estructura del MPN, que controla una vasta red de intendentes y punteros. En su campaña, el gobernador no disimuló su alianza con Menem, al que apoyó en las presidenciales de abril, y cuestionó las principales políticas del nuevo gobierno: el impulso a las causas por violaciones a los derechos humanos, la derogación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final y hasta el juicio a los integrantes de la Corte Suprema. Si triunfa, Sobisch buscará proyectar su potencia provincial en un liderazgo nacional de oposición a Kirchner.
En la semana previa a las elecciones, los docentes nucleados en ATEN tomaron escuelas y cortaron rutas en reclamo de mejoras salariales. Hubo reuniones en el obispado coordinadas por el vicegobernador de la provincia, Jorge Sapag, pero el conflicto aún no se ha solucionado. Es más: se sumaron estudiantes, trabajadores del Estado y piqueteros.
En realidad, el reclamo de los docentes no es nuevo para Neuquén, una provincia acostumbrada a la protesta social. Las luchas de los trabajadores y desocupados y la casi siempre violenta represión policial superan las de otras provincias, lo que se explicaría, al menos en parte, por la crisis generada por la privatización de YPF en zonas como Cutral-Có. La crítica situación social no es el único punto en contra de Sobisch, cuya carrera estuvo marcada por algunas acusaciones de corrupción. En 1995 fue acusado de pedir un crédito público para equipar una empresa particular aprovechando su condición de gobernador, y este año una cámara oculta lo mostró realizando maniobras dudosas para conseguir apoyo parlamentario para nombrar un juez.
A pesar de estos datos, Sobisch figura primero en las encuestas para gobernador. Se presenta junto al concejal Federico Brollo, que había sido derrotado por el radical Horacio Quiroga en las elecciones municipales. Sobisch consiguió el apoyo de otras fuerzas provinciales, Opción Federal y Apertura Popular, pero sin el respaldo de un sector importante del MPN: el actual vicegobernador, Jorge Sapag, renunció a la fórmula.
El principal adversario de Sobisch es Aldo Duzdevich, que se presenta acompañado por Ramón Riosec. En abril, Duzdevich se alineó Néstor Kirchner, que le devolvió el favor con el apoyo de su gobierno: el sábado de la semana pasada, el ministro del Interior, Aníbal Fernández, participó de un acto junto a la fórmula. Dos días más tarde viajó a Neuquén la hermana del presidente y titular de la cartera social, Alicia Kirchner. A pesar del apoyo del gobierno, Duzdevich no se tiene mucha fe: también
incluyó su nombre al frente de la lista de diputados nacionales. Con menos chances aparecen otros candidatos. El ARI postula a Carlos Moraña y Héctor Villar, que la semana pasada recibieron la visita de Elisa Carrió. “Sobisch es el representante más claro del menemismo en la provincia”, dijo la chaqueña. El radicalismo candidatea a Hugo Prieto y Néstor Burgos y Recrear, el partido de Ricardo López Murphy, a Jorge Taylor y Alberto Etcheverry.