La campaña electoral porteña parece encaminarse al ballottage con pocos sobresaltos. Los candidatos Horacio Rodríguez Larreta y Martín Lousteau continuaron ayer con la estrategia que se habían fijado al superar la primera vuelta. En medio de recorridas por los barrios y charlas con vecinos, el postulante del PRO volvió a pegarse ayer a la figura de Mauricio Macri, que en el último tiempo concentró sus energías en la ciudad para cuidar el único bastión que no puede perder si desea sostener con chances su proyecto presidencial. En cambio, Lousteau siguió focalizado en la cuestión local, sin posar junto a los referentes nacionales de su espacio. El aspirante de ECO volvió a reclamar un debate mano a mano con su contrincante, quien volvió a rechazarlo.

“Queremos seguir dándoles oportunidades a los jóvenes para que puedan encontrar su lugar, su vocación y sus espacios de protagonismo y de esa manera contribuir al desarrollo de nuestra Ciudad y de nuestro país”, sostuvo ayer Macri, poniéndose al hombro la elección local. El jefe de Gobierno porteño hizo esas declaraciones antes de conocerse que la Sala I de la Cámara Federal rechazara su sobreseimiento en la causa por las escuchas ilegales. Larreta también hizo una referencia al electorado joven, que según algunos sondeos publicados el último fin de semana se inclinaría por el ex ministro de Economía.

En declaraciones radiales, el funcionario macrista salió al cruce de las acusaciones sobre los gastos de campaña y aseguró que Lousteau “denuncia cualquier cosa”. “No es verdad, no hay ninguna prueba y ninguna denuncia de que se hayan usado recursos públicos para campaña”, respondió el actual jefe de Gabinete, quien consideró que la mayor parte de la publicidad “se usa en las campañas para que los porteños aprendan a reciclar la basura”.

Por otro lado, también rechazó las críticas que surgieron desde ECO por el tono de las declaraciones de los dirigentes del PRO. “No hay un solo comentario ni duro, ni agresivo, jamás”, consideró Larreta, quien prometió que, si resulta electo el próximo domingo, “a partir del lunes” convocará a “Lousteau, a Recalde, a Zamora, a todos para trabajar juntos”.

El macrismo tendrá, como en ocasiones anteriores, un cierre “surtido”. Junto a Macri y Gabriela Michetti visitarán el jueves la Plaza de la Flor, en Palermo, y luego realizará caminatas por Belgrano y Recoleta.

Desde las redes sociales, el ex ministro de Economía insistió con la necesidad del debate. “Aunque tocar los timbres de las casas para charlar con los vecinos está muy bien, no puede ser más importante que debatir la mejor manera de bajar la mortalidad infantil”, asegura el spot de Lousteau. Acompañado por su candidato a vice, Fernando Sánchez, el ex ministro de Economía desgranó los números del presupuesto porteño y cuestionó el aumento “fenomenal” de la presión impositiva en la Ciudad, mientras la administración macrista mantuvo un déficit fiscal “siete de los ocho años que gobernó”. “En 2014, el Gobierno de la Ciudad gastó tres veces más en propaganda que en las villas y en lo que lleva este año el PRO gastó por día en publicidad oficial 4 millones de pesos. Esto representa el doble de la inversión en hospitales y el triple en infraestructura escolar”, señaló Lousteau, quien propuso “cambiar las prioridades del gasto y la inversión”.

La semana pasada desde ECO habían denunciado una “campaña sucia” realizada a través de supuestas encuestas telefónicas en las que preguntaban a los vecinos si estaban de acuerdo con la realización del ballottage, que supuestamente le costaría a la Ciudad más de 50 millones de pesos. La maniobra era muy similar a la utilizada en 2011 contra Daniel Filmus. Bajo la pantalla de supuestas encuestas, se le brindaba a los votantes información falsa sobre los adversarios del PRO.