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El candidato del Frente Juntos por San Luis, Daniel Pérsico (PJ), se proclamó anoche ganador de la intendencia de San Luis, al cierre de una jornada electoral que se desarrolló en un escenario de confusión. Los comicios fueron convocados por el municipio y declarados ilegales por la Justicia electoral. En disputa con el gobernador Alberto Rodríguez Saá, la intendencia los mantuvo, argumentando que la Carta Orgánica local le da autonomía, pero tuvo que tomar medidas inéditas para concretar ese objetivo.
La primera fue la decisión de crear una policía municipal 72 horas antes de la elección, con la tarea de custodiar las urnas, ya que las fuerzas de seguridad nacionales y provinciales no cubrieron esa tarea. Tampoco se votó en los lugares de siempre: las escuelas habían recibido la orden de no abrir. Las urnas se instalaron en cambio en asociaciones vecinales, bailantas y dependencias comunales.
A este enrarecido ambiente se añadió el hecho de que muchos de los candidatos que se presentaron ayer también están inscriptos para participar de las elecciones del próximo 23, convocadas con el acuerdo de Rodríguez Saa y convalidadas por la Justicia electoral. Ese día se elegirán también legisladores nacionales y provinciales.
Anoche no estaba muy claro qué porcentaje de votantes había participado del llamado. Juan José Laborda Ibarra, candidato a intendente de la Alianza Mejor San Luis, que no participó de esta elección, señaló que habían concurrido “entre un 3 y un 5 por ciento del padrón”, de casi 100.000 electores.
Pero el ganador estimó que había votado “el 50 por ciento del padrón”. Pérsico es actual secretario de Obras Públicas de la comuna. En una conferencia de prensa, la secretaria de Gobierno del municipio, Miriam Agúndez de Graso, manifestó que “la ciudadanía de San Luis empezó a perder el miedo al feudo de los hermanos Rodríguez Saá”, y dijo que el día había transcurrido sin incidentes en un clima de total normalidad.