EL PAíS › INTENDENTES BONAERENSES EN GUERRA
El PJ y la ¿transversaliqué?
Estaba acordado que Sabbatella, en nombre de los independientes, presidiera la Federación Argentina de Municipios. Pero los intendentes del PJ decidieron cambiar las reglas para quedarse con todo.
Por Martín Piqué
Los intendentes del PJ bonaerense no parecen coincidir con los aires renovadores que impulsa su jefe político. La semana pasada, mientras Eduardo Duhalde presentaba una carta reclamando apoyo a Néstor Kirch-ner bajo la amenaza de ser “infames traidores a la patria”, los duhaldistas del conurbano decidían impulsar el cambio de los estatutos de la Federación Argentina de Municipios (FAM) para que la conducción fuera elegida por votación y no designada en forma rotativa. La decisión, que todavía debe ser discutida en la asamblea de la Federación, marginará de la mesa ejecutiva al bloque de intendentes independientes, muchos de ellos cercanos a la “transversalidad” que propone Kirchner. Por el método de alternancia hasta ahora vigente, al grupo de independientes le tocaba ejercer la conducción el año próximo. Todo indica que no será así.
La FAM es una asociación que representa a todas las intendencias del país. Defiende los derechos de los gobiernos locales ante la administración central –con temas importantes en la agenda de los próximos meses, como la coparticipación y la descentralización del cobro de impuestos– y tiene fondos asignados del Presupuesto. Hasta ahora, sus autoridades se iban rotando por año entre el bloque del PJ, el de la UCR y el de los independientes. Por ejemplo, durante todo este año la conducción estuvo a cargo del PJ y el presidente fue el peronista Accastello.
Como para el 2004 le tocaba presidir al bloque independiente, los intendentes que no pertenecen ni al PJ y ni al radicalismo habían elegido al intendente de Morón, Martín Sabbatella. Reelecto por un partido vecinalista de contenido progresista, Sabbatella tiene buenos contactos con Kirchner y Solá –ambos lo felicitaron por su triunfo, a pesar de haber vencido al candidato del PJ– aunque se mantiene cauto ante el proyecto transversal del Presidente. “No quiero ser el furgón de cola del tren fantasma”, dijo para explicar su postura.
Sin embargo, la semana pasada los intendentes del PJ bonaerense decidieron cambiar la designación de autoridades. Propondrán que no sea más por rotación sino por elección de todos los intendentes del país. En ese caso, el cargo quedaría inevitablemente para el PJ, que tiene amplia mayoría. El jueves último, en la sede de la FAM de Cerrito y Córdoba, el bloque justicialista comunicó la novedad a los otros dos sectores. Tanto los radicales como los independientes se levantaron de la reunión en protesta por la medida. En representación del PJ bonaerense sólo estuvo Julio Pereyra, de Florencio Varela, a quien algunos indican como el futuro titular de la Federación si los duhaldistas imponen su propuesta.
Indignados, los intendentes del bloque independiente firmaron una carta pública denunciando “la arbitraria y antidemocrática posición adoptada por el bloque de intendentes del Partido Justicialista”. En ella se denuncia que el PJ quiere “transformar un ámbito pluralista en un espacio monocolor y excluyente”. Luego solicitaron una audiencia con el Presidente “con la convicción de que comparte los principios que defendemos”. La carta está firmada por ocho intendentes independientes –provenientes de distintas tendencias, como el socialista, los provinciales, el vecinalismo–, entre los que se encuentran Sabbatella y el intendente de Rosario, el socialista Hermes Binner. Ambos tienen buenos vínculos con Kirchner.
La decisión del peronismo surgió de una reunión del PJ bonaerense. Para algunos miembros de la FAM, la avanzada del duhaldismo se puede entender por el anuncio del gobernador Felipe Solá de que intentará construir un “espacio propio” en la provincia, integrando a sectores del peronismo con otras figuras ajenas al PJ. En ese caso, los intendentes del conurbano se chocarían con lo que decidieron Duhalde y Solá en una reunión cara a cara entre ambos, el viernes último. Allí decidieron dejar de molestarse por “tonterías” para no complicar al Presidente. Parece que “los muchachos”, como los llama Duhalde, no tienen la misma intención.