La Policía Metropolitana allanó ayer las oficinas del estudio jurídico del ex ministro menemista Roberto Dromi en el marco de una causa impulsada el año pasado por dirigentes del PRO en la que se investiga al diputado y ex ministro de Infraestructura y Planificación, Julio De Vido, por supuestas irregularidades en compras de gas licuado al exterior. Se trata de la misma causa por la cual el juez Claudio Bonadio allanó en julio de 2015 las oficinas de YPF, la empresa de energía Enarsa y el Ministerio de Planificación.

Dromi contó en un reportaje que YPF había hecho compras de gas licuado a Rusia y agregó que había asesorado a la cartera de De Vido en varias operaciones. Según publicaciones periodísticas, el convenio fue firmado por Enarsa y la empresa española Contrater Consulting en agosto de 2008 para adquirir un barco de GNL de Rusia, pese a que esa firma no contaba con antecedentes sobre ese tipo de operaciones. Ante las sospechas de irregularidades, pronto llegó la denuncia de Federico Pinedo, Patricia Bullrich y Laura Alonso. El procedimiento de ayer fue en las oficinas del estudio de Dromi, en Córdoba 1255 de Capital Federal. La orden de allanamiento incluyó “contratos de concesión suscriptos por Enarsa” y documentación que vincularía a esa empresa estatal con otra privada que habría intervenido en operaciones sospechadas de fraudulentas. Los policías continuaron hasta las últimas horas de la tarde precintando computadoras y otros soportes informáticos que fueron secuestrados.

La causa 104567/14 caratulada “De Vido, Julio y otros, sobre asociación ilícita” no es la única en la que Bonadío tiene en la mira al ex ministro kirchnerista. El lunes de esta semana lo citó a prestar declaración indagatoria para el 21 de abril por su presunta responsabilidad en la tragedia ferroviaria de Once. Su colega Julián Ercolini, en tanto, pretende indagarlo el 27 de abril por la compra de material ferroviario a España y Portugal pagando sobreprecios.