EL PAíS › EL GOBIERNO ANUNCIARA CAMBIOS AL PLAN DE SALIDA DEL DEFAULT
En la mesa de la deuda habrá otra carta
Néstor Kirchner evaluó anoche junto a Roberto Lavagna los detalles finales de la propuesta para los acreedores defolteados. Página/12 adelanta los detalles de la oferta así como también las características que tendrán los nuevos bonos. El ministro presentará hoy el plan renovado.
Por David Cufré
Néstor Kirchner recibió anoche a Roberto Lavagna en la Casa Rosada para terminar de preparar el anuncio de la nueva oferta a los acreedores. Al cierre de esta edición, la decisión era que el ministro de Economía presente los datos esta tarde en conferencia de prensa. La última propuesta que Lavagna le elevó al Presidente contiene cambios respecto de la comunicada el año pasado en Dubai, según pudo saber Página/12 de fuentes que participaron en su elaboración. Kirchner tenía que dar su aprobación definitiva o practicar las correcciones que considerara necesarias. De confirmar el nuevo plan de reestructuración, la quita nominal se reduciría del 75 al 55 por ciento. Se emitirían bonos por 45.500 millones de dólares, contra títulos en default por 82.000 millones e intereses generados tras la declaración de cesación de pagos por 18.000 millones.
Si el Presidente convalida las nuevas condiciones, la diferencia respecto de la oferta de Dubai será significativa: la emisión de bonos aumentará en 25.000 millones de dólares. De 20.500 millones de Dubai se pasará a 45.500 millones. Esto es porque en la versión corregida se reconocen los intereses caídos y porque la quita del 75 por ciento ya no está expresada en valor nominal sino en valor presente.
En estos términos, la carga de la deuda total seguirá siendo tan pesada como antes del default. El fuerte rechazo que los acreedores venían expresando hasta el momento quedaría menguado. Por lo pronto, los economistas Daniel Artana (de FIEL), Mario Blejer (ex FMI y ex presidente del Banco Central) y Claudio Loser (ex FMI) elogiaron ayer la flexibilización en la postura argentina que trascendió a través de la prensa. El Ministerio de Economía mantendrá la próxima semana una nueva ronda de reuniones con los representantes de los distintos grupos de acreedores para explicarles los cambios en la propuesta.
Página/12 accedió a la última versión que Kirchner analizaba anoche. Se estructuró en base a tres bonos, que se detallan a continuación:
- Par: títulos en dólares, sin quita nominal y a 30 años de plazo. La tasa de interés será del 1 por ciento los primeros cinco años, subirá al 4 por ciento a partir de entonces hasta el año veinte y volverá a aumentar al 8 por ciento de allí al vencimiento. La emisión será por 20.000 millones de dólares. La prioridad la tendrán los inversores particulares, tanto argentinos como del exterior. Responde a la demanda de los bonistas, especialmente de Alemania, Italia y Japón, que prefieren estiramiento de plazos pero sin recorte nominal del capital.
- Descuento: bonos en dólares, con una quita nominal del 65 por ciento y a 30 años de plazo. La tasa de interés será alta, del 11 por ciento anual. Pero los primeros cinco años se capitalizarán 4 puntos de los intereses (por lo que se pagarán 7 puntos) y los siguientes cinco años se capitalizarán 2 puntos (se pagarán 9). Para los últimos veinte años la tasa a pagar será plena. El monto de emisión será de 17.200 millones de dólares. Se buscará colocar estos títulos entre los bancos y demás inversores institucionales.
- Cuasi Par: títulos en pesos, con una quita nominal del 30 por ciento y a 40 años de plazo. La tasa de interés será del 7,5 por ciento. Serán bonos para canjear con las AFJP, que entregarían títulos en dólares y aceptarían los nuevos en papeles, pero pesificados a 1,40. Además de la tasa de interés, había trascendido que los bonos se indexarían por CER, pero la propuesta no lo establece ni figura ningún otro método de ajuste. La emisión prevista es equivalente a 8300 millones de dólares.
De cada una de esas versiones, se presentarán títulos con distintos años de vencimiento. Es decir, habrá tres o cuatro series de bonos Par, otras tantas de Descuento y otras tantas de Cuasi Par, para calzarlas con los plazos de los bonos defolteados que rescatará el Estado. El acreedor podrá optar entre Par, Descuento y Cuasi Par, pero el año de vencimiento estaráen función del título que entregue. El esquema diseñado por Economía y los bancos asesores contempla cupos de emisión para cada tipo de bono. Una vez cubiertos, los acreedores tendrán que aceptar otros títulos. Pero, como se indicó más arriba, los bonistas particulares tendrán preferencia para optar por los Par y las AFJP por los Cuasi Par.
Los intereses generados tras el default que el Estado estaría dispuesto a reconocer son 18.000 millones de dólares. Hasta la fecha, en rigor, el devengamiento por ese concepto es de 25.000 millones. Pero Economía se plantará en los intereses devengados hasta 2003, como estaba sugerido en el Plan Dubai, dado que los de 2004 estarían contemplados en los nuevos títulos públicos a entregarse.
El Gobierno seguramente avanzará bastante menos en la información que presentaría hoy. Una razón es que antes de poder comunicar oficialmente las características de los nuevos papeles de deuda debe obtener una aprobación legal de las comisiones reguladoras de Estados Unidos (Securities and Exchange Commission) y Europa. Los títulos que se emitirán mantienen la jurisdicción legal que tenían los bonos que entran en el canje.
La oferta de reestructuración es consistente con un aumento del superávit fiscal respecto del programado para este año. Entre 2005 y 2010, el Estado debería generar un excedente equivalente a 3 puntos del PIB, contra el 2,4 por ciento actual. Después de 2010, el superávit se ubicaría en 2%. Esto es consistente, según Hacienda, con una economía creciendo a un ritmo anual promedio del 3%, con etapas de mayor expansión y otras recesivas, pero sin fuertes oscilaciones. Otro de los atractivos de la oferta mejorada es el “premio” por crecimiento económico. Si el avance del PIB supera determinado parámetro –sería el 3 por ciento anual–, los acreedores que hayan optado por el bono de Descuento cobrarían un plus.