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Por Santiago Rodríguez
@Aníbal Ibarra tiene hoy, según la encuesta que hace apenas un par de días recibieron en la Jefatura de Gobierno de la Ciudad, una imagen positiva del 45 por ciento. El dato entusiasmó a los principales colaboradores de Ibarra y les permitió corroborar que la clave para el desarrollo de su imagen es la obra pública. Es por eso que el ex fiscal reunirá el próximo martes a más de 200 funcionarios, legisladores y aliados en el Centro Cultural San Martín y allí los exhortará a que se conviertan en “comunicadores” del plan de obras puesto en marcha por su administración.
Las cifras sobre la evolución de la imagen de Ibarra animaron al equipo que colabora con la definición de su estrategia política porque no son muchos los dirigentes que en la actualidad gozan de ese grado de adhesión en el distrito. De hecho, los últimos números indican que el jefe de Gobierno integra un selecto grupo en el que se cuentan también el propio presidente Néstor Kirchner y su esposa Cristina Fernández; el ministro de Economía, Roberto Lavagna, y la jefa del ARI, Elisa Carrió.
No es ésa, sin embargo, la única razón del entusiasmo: la medición marcó además un crecimiento de la figura de Ibarra de diez puntos con respecto a agosto, que vuelve a consolidarlo en una posición en la que hacía tiempo no estaba. Ibarra presentaba niveles de adhesión similares a los que tiene en la actualidad –y aún mayores– en los meses iniciales de su primer mandato, pero la gran inundación de enero de 2001 marcó el principio de una caída en su imagen que, con altibajos, se profundizó aún más durante la crisis. Su repunte comenzó en febrero pasado en sintonía con el fortalecimiento de la imagen de Kirchner.
El análisis de sus asesores es que en esta ocasión también influyó en su crecimiento la mejora de la imagen del santacruceño, aunque también otro factor: el salto de diez puntos registrado en los últimos dos meses coincidió con el lanzamiento de la campaña Buenos Aires 10, que sintetiza las líneas de acción estratégicas que plantea la administración ibarrista para los próximos años.
Hacía tiempo que los asesores de Ibarra venían advirtiendo que no todas las medidas instrumentadas por el gobierno porteño incidían del mismo modo en la figura del jefe del distrito y que las de mayor impacto eran todas aquellas vinculadas con la obra pública. El sondeo que recibieron el último viernes confirmó esa hipótesis.
La encuesta, como las anteriores a las que se remiten para seguir la evolución de la figura de Ibarra, la realizó la consultora Nun-Adrogué-Caruso entre el 7 y el 14 de este mes. El tamaño de la muestra es de 400 casos. El sondeo reveló también que los porteños que tienen la impresión de que la ciudad estará en mejor situación en el futuro son más hoy que hace dos meses: en agosto dijeron tener esa percepción el 35 por ciento de los consultados y este mes respondieron en ese sentido el 41 por ciento.
En la misma línea se registró un crecimiento de 6 puntos el nivel de aprobación de la gestión de Ibarra, que de acuerdo con la última medición está en el orden del 50 por ciento. La encuesta arrojó un dato que ya había surgido en las anteriores: que alrededor del 20 por ciento de los consultados está conforme con el gobierno porteño pero no con el nacional. Según los ibarristas, se trata de un sector del electorado que Ibarra está en condiciones de contener y poner al servicio de Kirchner en el marco de la alianza que ambos mantienen.
La mejora de su imagen no es un dato menor en función de la estrategia que Ibarra se ha planteado. El año próximo no puede presentarse como candidato y tampoco puede ir por su reelección en el 2007 pero cuanto mejor posicionado esté, mayor incidencia tendrá en la definición de las candidaturas y aumentará su capacidad para direccionar en voto.
Con el dato de que la obra pública es el mejor modo de ganarse a los porteños, Ibarra está decidido a instalar fuertemente en la agenda pública los planes que tiene para la ciudad en el futuro y el primer paso lo daráeste martes. Los más de 200 funcionarios de su administración, legisladores y aliados que convocó para ese día a las 10 de la mañana al Centro Cultural San Martín verán un spot que hará un repaso de las acciones encaradas por el gobierno porteño con un mensaje claro: “Buenos Aires 10 es más que un campaña. Es un trabajo de todo el gobierno y cada integrante de la gestión tiene un rol protagónico en la comunicación”. Una vez que concluya, se encenderán las luces y recién entonces Ibarra entrará en escena para pronunciar un discurso que perseguirá el mismo fin. “La idea es que cada uno de los miembros de esta gestión nos convirtamos en agentes comunicacionales y salgamos a debatir con la sociedad la ciudad que queremos para el futuro”, adelantó uno de sus hombres.