EL PAíS
“Cavallo cajoneó causas para lograr su ascenso”
El titular de la Comisión de Legislación Penal, Hernán Damiani, acusó al camarista Gabriel Cavallo en pleno recinto. Dijo que “cajoneó” expedientes para lograr su ascenso. Defendió las modificaciones al Código Penal.
Por Eduardo Tagliaferro
Algunos jueces federales les habían mojado la oreja cuando dieron a entender que el Congreso había votado una virtual amnistía para los casos de corrupción al modificar el Código Penal y las causas que determinan una prescripción judicial. Fue el radical misionero Hernán Damiani el encargado de responder pidiendo una cuestión de privilegio contra el camarista Gabriel Cavallo, de quien dijo “me he enterado que se ha dedicado a cajonear expedientes para lograr su propio ascenso”.
En los pasillos, los diputados recordaban que Cavallo ascendió a camarista federal luego de haber estado al frente de la causa por los sobornos en el Senado, en tiempos del gobierno de Fernando de la Rúa. Luego de haber ocupado el tercer lugar en el concurso para camarista, en sucesivas etapas fue ascendiendo hasta compartir el primer lugar con quien había salido primero: el juez Raúl Magariños. La última palabra la tuvo De la Rúa.
Damiani recordó que los tres proyectos subsumidos en el que finalmente fue aprobado por el Senado en la última sesión del año, fueron originados por diputados de distintas bancadas. También señaló que otros proyectos similares habían sido presentados en anteriores períodos parlamentarios. El legislador defendió a la Comisión de Legislación Penal, que preside, y destacó que en ella se expresa todo el arco político.
La moción de privilegio fue una respuesta a lo que los legisladores interpretan como la repetición de “verdades a medias”. Ni en los pasillos, ni en el recinto, los diputados ocultaron su enojo por cómo había sido presentada la iniciativa en los medios de comunicación.
“Hay medios que parecen rehenes de determinados jueces que los están investigando por lavado de dinero”, afirmó Damiani en el recinto cuando presentó la cuestión de privilegio. “Le doy las iniciales de quien estoy hablando. Se llama La Nación”, le respondió el legislador a este diario cuando se le pidieron precisiones.
Interrumpido por las constantes muestras de respaldo y de identificación con su posición, Damiani comentó a este diario que “luego de haber denunciado una virtual amnistía, La Nación le da aire, como dicen los periodistas, a algunos jueces que parecen ser nostálgicos de la servilleta y de la discrecionalidad”.
Para Damiani la reacción de algunos jueces es una clara respuesta corporativa de quienes defienden un arma poderosa. La decisión discrecional de definir cuándo se interrumpen y cuándo no los tiempos de la prescripción judicial. “Hay jueces que mantienen privados de libertad a ciudadanos que ni siquiera fueron indagados”, señaló Damiani para dejar en claro qué poder defienden los jueces que calificaron de “irresponsable” la ley del Congreso.
El legislador también dio un ejemplo concreto sobre las causas que duermen durante años y en las que nadie va preso. “Esa tonelada de papeles que se juntaron en la causa AMIA, que nos duele a todos, no sirven para tener a nadie preso más de un día.” La lectura de la Cámara y de Damiani en particular es contundente: “Que nunca más se engañe a nadie con verdades a medias”.
Los legisladores no tienen dudas de que su iniciativa no tendrá efectos nocivos en las investigaciones de corrupción. Destacan que si eso ocurre no será por la norma sino por la inacción de los magistrados.