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Un día después de su cena-acto en La Boca, el precandidato a senador por La Rioja, Carlos Menem, se reunió otra vez en Mar del Plata con su renovado aliado Adolfo Rodríguez Saá. “Los traidores agonizan en vida, mientras que los que son leales”, como él se autocalificó, “mueren de pie”. “No somos transversales, somos verticales. Verticales a (Juan) Perón, a Eva Perón y a la doctrina del justicialismo”, se entusiasmó ante unas setecientas personas en el Centro Gallego de Mar del Plata. Los ex presidentes reclamaron la normalización del Partido Justicialista mediante elecciones internas. Desde el gobierno nacional y el duhaldismo consideran que ese pedido caerá en saco roto en un año en que la prioridad son las elecciones legislativas de octubre.
Con ese objetivo, en este nuevo encuentro ambos ex presidentes también desgranaron críticas hacia el Gobierno y se diferenciaron de la transversalidad. “Con elecciones internas como corresponde, sin trampas, nuestra agrupación va a triunfar, como siempre”, pronosticó el ex mandatario riojano y remató con que “el transversalismo vació (al PJ) de contenido político y también lo vació de solidaridad”. En alusión al gobierno nacional afirmó que “no saben hacia dónde va el mundo: mientras la Argentina procura conformar un eje con Venezuela y Cuba, lo que en realidad necesitamos es alinearnos con las grandes potencias del mundo”.
El efímero ex presidente puntano reivindicó la necesidad de elecciones internas porque “en la vida de los partidos políticos está la clave de la democracia”.