EL PAíS › NUEVO ANIVERSARIO DE LOS ASESINATOS DE AVELLANEDA
A tres años de la masacre
Frente a los Tribunales de Lomas de Zamora comenzaron los actos que concluirán el domingo 26. Hoy declaró un jefe policial que dijo que ni él ni Fanchiotti tenían órdenes especiales.
Por Laura Vales
Con una obra de teatro frente a los Tribunales de Lomas de Zamora, comenzaron los actos en reclamo de justicia por los asesinatos de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki, de los que el domingo se cumplirán tres años. Las actividades continuarán mañana en el Obelisco, mientras que el domingo habrá un corte de tres horas en el Puente Pueyrredón, donde las organizaciones sociales leerán un documento unitario. Los movimientos de desocupados y las fuerzas políticas que convocaron al corte en Avellaneda sostuvieron que a pesar del tiempo transcurrido no se ha avanzado en establecer las responsabilidades políticas por la represión que dejó 33 heridos de plomo, y cuestionaron “el papel central” que en ese sentido “viene cumpliendo el gobierno de Néstor Kirchner”.
Ayer, en Lomas, el escenario fue un palco en el que, como telón de fondo, se veían caricaturas del ex presidente Eduardo Duhalde y su entonces ministro de Seguridad Juan José Alvarez. El homenaje se inició con una puesta de Pasión del piquetero, un texto de Vicente Zito Lema. Terminada la obra, subió la orquesta típica Fernández Fierro para tocar un repertorio de tangos. También actuaron murgas y el grupo Contravientos, de músicos del Frente Darío Santillán.
Las actividades anunciadas para el fin de semana son las siguientes:
- Sábado, 16 hs, en el Obelisco funcionará una radio abierta. A partir de las 18 se proyectarán videos sobre el 26 de junio.
- Sábado, 14 a 20 hs, en Glew. Muestra de dibujos de Maximiliano Kosteki. También se expondrán fotos sobre su infancia. En Gringo Viejo, Gutiérrez 930 (entre Luro y Olivera).
- Sábado, desde las 21. Vigilia en la bajada del Puente Pueyrredón.
- Domingo, de 12 a 15. Acto unitario sobre el puente de las organizaciones de desocupados y partidos políticos de izquierda.
Los desocupados levantaron el campamento que habían montado frente a los Tribunales cuando la apertura del juicio, un mes atrás. La protesta, señalaron en el Frente Darío Santillán, volverá a instalarse cuando se acerque la fecha del veredicto sobre los ocho policías que están siendo juzgados.
Mientras en la calle se levantaban las últimas carpas, en el interior del edificio era llamado a declarar el comisario Raúl Roda, quien el día de la represión actuó como jefe del grupo Marea Azul, de la Bonaerense.
El hombre –como lo vienen haciendo todos los policías que declararon– sostuvo que el 26 de junio del 2002 llegó a Avellaneda sin órdenes específicas. Sólo le indicaron, dijo, que debía apoyar con sus tropas el operativo de seguridad. De acuerdo con su versión, ninguno de los policías bonaerenses que estuvieron al mando del operativo recibieron tampoco órdenes de sus superiores.
Roda lo contó de este modo: “Encontré (a Fanchiotti) desayunando con el comisario de la 1ª de Avellaneda en la confitería que está pegada al puente. (Fanchiotti) me preguntó si yo tenía órdenes especiales, le dije que sólo dar apoyo a la infantería de Avellaneda. Después él le preguntó al comisario de la 1ª si él tenía órdenes, y el comisario le respondió que no. Fanchiotti nos dijo que él tampoco tenía ninguna orden especial”. En la sala de audiencias, no hubo comentarios sobre la peculiaridad de tal diálogo.
Sí le preguntaron a Roda por el incidente entre los manifestantes y la policía que desató la represión. Aquel día, el comisario desplegó sus hombres, sobre la avenida Pavón, en una delgada línea de efectivos con la que chocaron los piqueteros. El porqué de esa medida es un misterio: nadie sabe si se trató de un acto de impericia policial o de una provocación. Roda dijo que lo hizo cumpliendo lo que le indicó Fanchiotti. Al parecer, agregó, la Policía Federal iba a dejar libre el Puente Pueyrredón para que los manifestantes cruzaran hacia la Capital. “A él (a Fanchiotti) se lo iban a indicar de la Federal”, sostuvo. Si fuera cierto, Fanchiotti no habría estado huérfano de órdenes como sostiene la historia oficial. Pero el comisario no dio más detalles sobre el tema.