EL PAíS › TABARE VAZQUEZ BUSCA ESCLARECER LA
DESAPARICION DE LA NUERA DE GELMAN
Sin impunidad para los asesinos
El presidente de Uruguay decidió que el caso de María Claudia Iruretagoyena, la nuera del poeta Juan Gelman, que desapareció en ese país tras dar a luz a Macarena, identificada recién en el 2000, no se incluya en la Ley de Caducidad.
El presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, terminó ayer con el cerco de impunidad que impedía avanzar en el esclarecimiento del secuestro y asesinato de la nuera de Juan Gelman en ese país durante la dictadura: estableció que su caso no está comprendido en la ley que impide juzgar a los represores uruguayos por sus violaciones a los derechos humanos. Vázquez ordenó, además, la realización de “las investigaciones pertinentes” para encontrar los restos de María Claudia García Iruretagoyena, quien aún permanece desaparecida.
La decisión de Vázquez es el resultado de la lucha que desde hace años mantiene Gelman con el propósito de determinar qué pasó con su nuera y que en 2000 le permitió recuperar a su nieta, Macarena, nacida durante el cautiverio de su madre. María Claudia fue secuestrada en Buenos Aires en agosto de 1976 y trasladada en forma ilegal a Montevideo. Entonces, también fue detenido su esposo, Marcelo Gelman, quien fue ejecutado y cuyo cuerpo fue encontrado después en Buenos Aires. La nuera de Gelman estaba a esa altura embarazada de una beba de siete meses de la que se apropió, tras su nacimiento, un policía uruguayo.
Fue un pedido de reapertura del caso formulado por el abogado de Gelman en Montevideo, José Luis González, lo que dio pie a la decisión de Vázquez de excluirlo del alcance de la Ley de Caducidad, como se denomina la normativa que consagró la impunidad de los represores uruguayos. “Era la resolución que estábamos esperando”, destacó el letrado a Página/12 y consideró que ahora será posible avanzar en el esclarecimiento de lo que ocurrió con María Claudia.
Lo dispuesto por Vázquez no hace otra cosa que ratificar lo que el propio mandatario dijo durante su campaña y repitió el día mismo de su asunción, el pasado 1º de marzo: que el asesinato de María Claudia no podía quedar bajo el manto de impunidad de la Ley de Caducidad, como tampoco los de los senadores uruguayos Zelmar Michelini y Héctor Gutiérrez Ruiz, quienes fueron asesinados en Buenos Aires por fuerzas de la represión.
Vázquez ordenó también “realizar las investigaciones pertinentes a efectos de avanzar en la aclaración del destino final de los ciudadanos detenidos desaparecidos durante la dictadura” y encomendó a los jefes de las fuerzas armadas que colaboren en la búsqueda de información al respecto. Además, dio instrucciones de que se hagan “los trabajos de campo en los lugares que se marquen como eventuales sitios de remoción de tierra y que estén ligados a denuncias específicas o sospechas técnicamente comprobadas donde pudieran haberse constituido cementerios clandestinos”.
El mandatario uruguayo cambió así el rumbo impuesto por su antecesor Jorge Batlle, quien se negó sistemáticamente a permitir la reapertura del caso de la nuera de Gelman, a pesar de los reiterados pedidos que en ese sentido le hizo el presidente Néstor Kirchner desde que llegó a la Casa Rosada. Desde un primer momento, el santacruceño confirió al esclarecimiento del asesinato de María Claudia un lugar central en la relación bilateral con Uruguay y la negativa de Batlle a avanzar en ese camino llevó al deterioro de la relación entre ambos.
González explicó a este diario que la notificación formal de la resolución de Vázquez llegará entre el lunes y martes próximos a manos del juez penal Gustavo Mirabal, quien tiene a su cargo la investigación judicial del caso de la nuera de Gelman. “Una vez que el magistrado tome conocimiento de la resolución va a recobrar sus potestades naturales y la causa pasará a ser común y corriente”, precisó el abogado y adelantó que desde entonces Mirabal “va a poder citar a testigos civiles o militares, así como también procesar y detener a aquellos que considere responsables como resultado de las pruebas que vayan surgiendo al cabo de la investigación”.
El principal sospechado de haber asesinado hace casi 30 años a María Claudia es el ex policía devenido en agente de inteligencia Ricardo José Medina Blanco. Según publicó hace un par de semanas en Uruguay el diario La República, Medina Blanco participó de la caza de uruguayos en Buenos Aires, fue quien entregó a una familia de policías amigos a la hija que la joven dio a luz en el Hospital Militar de Montevideo y también sería uno de los que la trasladó a la Base Valparaíso. El senador Rafael Michelini reveló en su momento que el mismo Batlle le confesó que fue Medina Blanco quien mató allí a la nuera de Gelman.
El abogado de Gelman evaluó que “Michelini seguramente será citado como testigo” por Mirabal y no descartó también que sea convocado el ex presidente. “Batlle –razonó– debería ser citado porque en la denuncia aparece mencionado como que sabe quién es el asesino de María Claudia.”