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A punto de asumir como senador nacional, Carlos Menem quedó a un paso de ser llevado, por primera vez, a un juicio oral y público. Es por haber omitido en su declaración jurada una cuenta en Suiza y numerosos bienes suntuarios; la Cámara Federal de Apelaciones, que ayer confirmó su procesamiento, le encomendó al juez Norberto Oyarbide que no demore más la investigación y eleve el caso para que el ex presidente sea juzgado. El delito prevé, ante una condena, la inhabilitación para ejercer cargos públicos.
La causa se inició cuando Menem, de manera sorpresiva, en una entrevista de la CNN, admitió tener una cuenta bancaria en el exterior con unos 600 mil dólares, a nombre de su ex esposa Zulema Yoma y de Zulemita.
La pesquisa avanzó con paso vacilante. De hecho, Oyarbide primero sobreseyó a Menem y sólo más tarde, por orden de la Cámara, revisó su decisión para procesarlo. En el camino, le descubrieron al ex presidente otros bienes no declarados, como dos autos, dos aviones ultralivianos, acciones en tres compañías telefónicas, otras dos cuentas bancarias dentro del país y dos departamentos en la ciudad de La Rioja. Oyarbide amplió por esto el procesamiento, sumando al delito de omisión maliciosa los de incumplimiento de los deberes de funcionario público y falsedad ideológica. La ampliación fue apelada por el abogado de Menem, Alejandro Novak, y en respuesta a este planteo se dictó el fallo conocido ayer.
En la nueva resolución, los integrantes de la Sala II de la Cámara Federal, Horacio Cattani, Martín Irurzun y Eduardo Luraschi, puntualizaron que los numerosos “olvidos” en la declaración jurada constituyen un solo hecho de omisión maliciosa, pero confirmaron el procesamiento del ex presidente.
Menem hizo su descargo por escrito, en abril pasado. En la presentación, argumentó que no tuvo malicia, sino que cometió descuidos:
- Dijo que los dos departamentos no declarados se los había pasado a su hija Zulemita, pero luego no realizó el trámite de la transferencia legal.
- Para los dos autos (una Trafic y un Fiat 147) mencionó una razón parecida: los vendió, dijo, pero nunca hizo la transferencia.
- De los aviones ultralivianos sostuvo que uno estaba desarmado y el otro inutilizable, por lo que había pedido que los dieran de baja en el registro nacional de aeronaves.
- De la cuenta bancaria local, dijo que casi no tuvo movimientos y por eso no la incluyó.
- De las acciones sostuvo que hubo un error porque declaró todas como si fueran de Telecom, cuando tenía además de Telefónica y de otra compañía de celulares.
Oyarbide refutó a su vez esos argumentos. Sostuvo que las explicaciones de Menem sobre los departamentos a su nombre, ubicados en el Edificio Presidente de la ciudad de La Rioja, eran “poco creíbles”. El juez explicó que a pesar de tener poco movimientos, las cuentas en el banco riojano reflejan un monto muy superior al consignado por el ex presidente en su declaración jurada, ya que había depositado allí 35 mil pesos. Las acciones telefónicas sumaban, también el doble de las consignadas. Y el pedido de baja de los aviones fue posterior a la presentación de la declaración jurada.
Menem estuvo prófugo por esta causa por ocho meses, durante los cuales vivió en Chile con su esposa Cecilia Bolocco, con pedido de captura internacional por faltar en forma reiterada a las citaciones a declaración indagatoria.
Cuando finalmente se presentó a la Justicia, en diciembre de 2004, se lo eximió de prisión bajo una fianza de tres millones de pesos. En este último fallo, los camaristas confirmaron un embargo de dos millones de pesos sobre los bienes del investigado.
Todo indica que Menem se escudará en los fueros de su nueva condición de senador electo. El fallo –y el hecho de que tenga otras causas judiciales en curso– abre la posibilidad de que impugnen su pliego (ver aparte). De ser así, el recurso debería presentarse más que rápido: la asunción de loslegisladores se realizará el 29 de noviembre, es decir en menos de dos semanas.