“¡Es un disparate! ¡Es un disparate!” Alberto Fernández no encontraba anoche otras palabras para calificar la propuesta de Ricardo López Murphy de crear un Foro para la Defensa de la República. “¿Ese señor que no logró que lo vote la gente quiere ser fiscal de la República? ¿Ese señor que es socio de Macri, quien se benefició del mal funcionamiento de la Justicia y la mayoría automática de otra época, habla de institucionalidad? Por favor, decir que en la Argentina no funcionan las instituciones es un disparate. Es parte del desorden mental de la oposición”, terminó su andanada un malhumorado jefe de Gabinete. La idea de López Murphy tuvo ayer el apoyo de los sectores de derecha.

Fernández no hizo otra cosa que reproducir el pensamiento de Néstor Kirchner. El Presidente cree que se está buscando instalar la idea de un Gobierno autoritario e irrespetuoso de los poderes públicos. E incluye en esa supuesta campaña la versión sobre el intento oficial de adelantar las elecciones. En ese sentido, el jefe de Gabinete recordó que “para evitar oportunismos fue esta administración la que estableció por ley la realización de los comicios el cuarto domingo de octubre”.

En rigor, la polémica con López Murphy se disparó la semana pasada. Entonces, el líder de Recrear reunió en su cruzada contra el proyecto oficial de reforma del Consejo de la Magistratura a Mauricio Macri (PRO), Elisa Carrió (ARI), Federico Storani (UCR), Patricia Bullrich (Unión por Todos), Claudio Lozano (CTA) y al socialista Hermes Binner.

El Bulldog ahora quiere transformar esa foto en una película y prolongar el entendimiento con el arco opositor. El diputado electo Luis Patti fue de los pocos que salió a respaldarlo abiertamente, fuera de la dirigencia del PRO. “No hace más que expresar un pensamiento común que tenemos todos”, dijo el represor, quien alguna vez tuvo un sueño de sociedad política con López Murphy. Es cierto que hubo otros apoyos desde el macrismo y también del demócrata progresista Alberto Natale.

Fernández no sólo desacreditó al impulsor del Foro, sino que se burló una y otra vez sobre su objetivo. “Quieren hacernos creer que las instituciones están en peligro. Por favoooooooooooorrrr, es un disparate atroz.”

–Usted sabe que existen duros cuestionamientos al proyecto oficial del Consejo de la Magistratura

–Mire, este gobierno le pagó al FMI y bajó su deuda en 70 mil millones, hizo crecer al país al 9 por ciento. Bajó la pobreza y la desocupación.

–Pero...

–Déjeme decirle: nombramos a sólo a cuatro jueces federales, todos salidos de concursos sustanciados antes de nuestra llegada al Gobierno. Removió la Corte Suprema automática y nombró cuatro jueces dignos, técnicamente brillante. ¿Eso pone en riesgo la institucionalidad o la consolida?

–¿Están todos locos los que se sacaron la foto? Son muchos los que plantean que este gobierno es hegemónico

–Realmente pienso que la oposición no sabe ya qué hacer. ¿De qué hegemonía me hablan?

–Hay quejas de que el Gobierno no da lugar al diálogo, que es autoritario...

–Nosotros ganamos las elecciones. La gente nos votó y nos otorgó el 54 por ciento de los escaños en juego del Congreso. López Murphy salió tercero, cómodo, con menos del 8 por ciento de los votos. Eso parece que no lo tolera y entonces pone en duda la vigencia de la República. Eso no es serio.

–López Murphy dice que....

–...López Murhpy, que de pronto se cree el fiscal de la República, es socio de Macri. Y Macri es quien se benefició con la mayoría automática y la mala justicia que tuvo la Argentina. No se olviden de la famosa causa de contrabando de autos que dio lugar a una acusación sobre los jueces de la Corte que lo beneficiaron a Macri.

El enojo de Fernández por la movida del líder de Recrear trascendió su despacho. Muy cerca de allí, otro de los pocos funcionarios que transitaron ayer la Casa Rosada, atacó no sólo al Bulldog, sino al ex ministro de la Alianza, el radical Ricardo Gil Lavedra.

“Lo que no soportamos es que en el encuentro que hizo toda la oposición haya querido dar cátedra sobre independencia jurídica cuando fue él quien garantizó la mayoría automática después de escribir con (el ex ministro menemista Carlos) Corach el acuerdo programático por el cual se subió a nueve los miembros de la Corte Suprema”, señaló a este diario.

Desde el kirchnerismo, en cambio, no hubo opiniones sobre la posibilidad de la conformación de un frente de centroderecha, como derivación del encuentro que López Murphy organizó en el Congreso con todo el arco opositor. Ese debate quedó, en cambio, en manos de radicales, socialistas y macristas. El ARI, previsiblemente, negó toda posibilidad de conformar una “mayoría automática opositora”, menos de la mano de exponentes como López Murphy y Macri, aunque no descartó otra foto como la de la semana pasada si consideran amenazada la institucionalidad.

Desde el radicalismo, su presidente, Roberto Iglesias, desechó participar de un frente de centroderecha y lo mismo hizo saber el socialista Binner en recientes contactos que mantuvo con la Casa Rosada. En cambio, Macri y el gobernador de Neuquén, Jorge Sobisch, se mostraron partidarios de formar un gran frente opositor.

“Hay que hacer un amplio acuerdo político y construir poder”, señaló a través de un comunicado el titular del Movimiento Popular Neuquino. Seguramente a eso se abocarán en los próximos días.