–¿Qué piensa de la propuesta de Ricardo López Murphy de crear un Foro para la Defensa de la República?

–La oposición ha dado una clara muestra de nuestra posición, que ha asumido Mauricio (Macri), en relación con la reforma del Consejo de la Magistratura. Respecto del Foro, tampoco creo que la república esté en situación de desaparición, pero sin duda hay que mejorar la calidad institucional. Esta propuesta debería ser de todas las fuerzas: de los oficialistas de turno y de los opositores. Dar calidad institucional al ciudadano debería ser una prioridad de todos.

–¿Y sobre la idea de López Murphy de formar un frente de centroderecha?

–Armar un frente siempre es bueno, porque la acumulación de fuerzas nos llevó al triunfo en la ciudad de Buenos Aires. Yo tengo un pensamiento más de centro, no tan de derecha, y una visión más peronista del crecimiento. López Murphy tiene una posición más de derecha, por eso se habla de centroderecha. La sumatoria lleva a una discusión que debe saldarse en beneficio de la gente.

–¿Se imagina en un foro junto con Luis Patti, que apoyó la idea?

–Soy militante en el peronismo y creo en la doctrina justicialista, por lo que cualquiera que se pronuncie a favor del Foro habrá que ver si comparte nuestras ideas. Una cosa es de lo que se lo acusó en el recinto, pero lo que me pregunto es por qué lo dejaron competir.

–¿Usted cree que no debería haber competido?

–No soy yo el que lo digo. Si es real todo lo que dicen, la Justicia tendría que haber actuado antes.

–Además de Sobisch, ¿a qué otros partidos imagina en una coalición opositora?

–No sé si el ARI tendrá una posición cercana, aunque yo tengo un profundo respeto intelectual por Carrió. También admiro al socialismo y su tradición en nuestro país, por lo que no descarto alianzas. Además hay un montón de compañeros peronistas en el país que se pueden sumar, porque tienen una visión de país similar a la nuestra.

–El jefe de Gabinete consideró que López Murphy debería dedicar “su tiempo libre a cosas más útiles” que pensar en este Foro.

–La oposición tiene que acompañar las cosas que sirven al mejoramiento de las instituciones y oponerse en los temas que no llevan a esto. La oposición es oposición y tiene que marcar los puntos donde está en desacuerdo. Me parece que limitar a la oposición no es democrático.

Reportaje: Werner Pertot.

–¿Qué opina de la idea de Ricardo López Murphy de crear un Foro para la Defensa de la República?

–Hay que hacer cosas puntuales, como fue lo del Consejo de la Magistratura, que justificaba que hubiera una oposición a un proyecto que quiere anular la independencia del Poder Judicial. Pero no estoy de acuerdo con un foro permanente. Y menos todavía con un frente de partidos, si no hay coincidencias en lo ideológico. Tenemos diferencias con López Murphy, que expresa la derecha y las recetas neoliberales. Me fui del gobierno de De la Rúa cuando llegó López Murphy a aplicar un ajuste.

–Parece coincidir, entonces, con Alberto Fernández, que plantea que López Murphy debería dedicarse a “cosas más útiles”...

–A Alberto Fernández no le tengo demasiado respeto como político, ya que proviene de las filas del cavallismo y ha tenido un pragmatismo extraordinario en su carrera. Si está descalificado López Murphy, también lo está Alberto Fernández por su falta de coherencia.

–¿Con qué fuerzas sí vería posible una alianza a futuro?

–Primero, el radicalismo debe tener una posición de independencia frente al Gobierno. Por eso veo con buenos ojos que se haya designado a (Roberto) Iglesias al frente del Comité Nacional, que tiene independencia frente al Gobierno, a diferencia del gobernador de su provincia, Mendoza. Tampoco pensamos poner todo el tiempo palos en la rueda. A partir de nuestra identidad veremos con quiénes acordamos.

–¿Por ejemplo?

–Estoy conforme con la alianza con el socialismo que triunfó en Santa Fe. Ellos tienen nuestra misma actitud: no oponerse a todo, pero sí guardar la independencia frente al Poder Ejecutivo.

–¿Y el ARI?

–El ARI también. El problema del ARI ha sido el planteo personalista de su líder y su sectarismo. Si predominaran los sectores que buscan un espacio socialdemócrata moderno, se podría formar un buen núcleo en torno del radicalismo, por su estructura territorial. Pero esperar un escenario apocalíptico para creer que ha llegado su hora hace difícil construir.

–¿Qué futuro le ve, entonces, a la foto del martes pasado?

–No lo veo como frente electoral, aunque puede tener futuro en el tema institucional. El Gobierno intenta crear una falsa polarización con Macri, López Murphy y Sobisch, pero están a años luz de ser como la Concertación chilena. Lo único que ha mostrado es la cooptación de dirigentes como Borocotó, que no es el ejemplo más claro de progresismo ni de seriedad.

Reportaje: W. P.

–¿Cuál es la postura del ARI frente a esta convocatoria de López Murphy de conformar un foro opositor?

–Nuestra posición es no estructurar ningún tipo de coalición. No queremos conformar una mayoría automática de la oposición.

–Pero el ARI ha sido uno de los partidos que más empeño ha puesto en la convocatoria para oponerse a la reforma del Colegio de la Magistratura.

–La única finalidad de esa reunión, que se realizó a fin de año, fue plantear la necesidad de ponerles freno a las violaciones constitucionales: ponerle un bypass gástrico al apetito desmedido de poder del gobierno.

–El Gobierno no sólo rechazó las opiniones que lo causan de impulsar un proyecto hegemónico sino que descalificó duramente ese encuentro.

–Lo compararon con la Unión Democrática y me parece demasiado exagerado: ni el encuentro de los partidos opositores es la Unión Democrática ni (Néstor) Kirchner es (Juan) Perón.

–¿Descartan entonces una coincidencia con López Murphy?

–Tenemos diferencias fundamentales. En verdad no tenemos mucho en común.

–¿Tampoco analizan alianzas con el resto de los partidos?

–Nuestra postura es no hacer alianzas ahora. Consideramos que tras el triunfo electoral, el Gobierno intentará cooptar parte de la oposición. Esperaremos que decante esa situación y en el segundo semestre de 2006 analizaremos el tema. No proponemos unirnos contra alguien sino unificar conductas, prácticas y objetivos diferentes a los de este gobierno. Tampoco se modifica con armar un aparato más grande que el kirchnerismo: es un tema de conciencia social y no de alianzas de dirigentes.

–Federico Storani dijo que considera al ARI un potencial aliado si (Elisa) Carrió deja de lado sus posturas sectarias y personalistas.

–La postura del ARI sobre alianzas políticas son decisiones partidarias y no de Carrió. No proponemos coaliciones para sacar algunos votos más, sino dar pasos coherentes y hay consenso en el partido sobre este planteo. Igual creo que podemos coincidir con algunos radicales pero no con la UCR. Ellos han tendido responsabilidades en lo que pasó en los últimos años.

–¿Volverían a participar en un frente o encuentro como el que se opuso a la modificación del Consejo de la Magistratura?

–En caso de atropello a las leyes no tenemos inconvenientes en juntarnos a favor de defender la legalidad sin marginar a nadie. Para poder ponerle freno a esos atropellos se necesita una relación de fuerzas favorable.

Reportaje: Miguel Jorquera.