La Conferencia Episcopal presentó ayer el libro Una tierra para todos, en el que sienta su posición sobre la función social de la propiedad y la tenencia de la tierra. Los miembros de la Pastoral Aborigen, Marcelo Melani y el obispo de Orán, Jorge Lugones, el titular de la Pastoral Social, Jorge Casaretto, y la representante de Cáritas, Juana Ceballos, fueron los encargados de la presentación.

En el libro se analiza que “a partir de una concepción utilitaria de la propiedad se profundizó en nuestro país el proceso de concentración de las tierras productivas”. También especifica que “ese proceso tiene casi treinta años de duración, continúa vigente y afecta principalmente a pequeños y medianos productores agrícolas”, y que el principal factor de esa concentración es la venta de éstos a grandes corporaciones.

En el documento se señala la escasa voluntad política estatal para equilibrar la distribución de terrenos rurales, así como lamenta que los distintos gobiernos no saldarán la deuda histórica con los pueblos originarios a pesar del rango constitucional que el derecho a las tierras tradicionalmente ocupadas tiene desde su última reforma.

Entre los presentes estuvo el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, quien destacó la importancia de que la Pastoral haga oír su voz “en los temas que le importan a todos los argentinos”, y que “ésa es la voz de la Iglesia que debe hacerse más visible en los problemas de la gente”. A su vez, pidió que “en el Gobierno no deben tomar este trabajo como una crítica, sino como un aporte para que haya políticas públicas en los problemas de la tierra”.

El libro es una investigación de las distintas comisiones episcopales junto con la Universidad Católica y se propone “aportar a la reflexión sobre la propiedad de la tierra y el uso ordenado de los recursos naturales”.