“Cuando hoy (por ayer) tocó la campanita de Wall Street (la Bolsa de Comercio de Nueva York) les avisó a las petroleras que hay recreo.” Con esa definición, el diputado nacional Eduardo Macaluse justificó la postura de ponerles límites a los negocios de hidrocarburos en el país. Acompañado por la mayoría de sus compañeros de bancada, el legislador del ARI presentó un proyecto para la creación de una comisión bicameral de “investigación de los negocios petroleros, la revisión de los contratos estatales y privados, las acciones y sus propietarios”. Una iniciativa –que según los aristas– sería acompañada por diputados opositores y contaría con el beneplácito de no pocos oficialistas.

A una semana de que la Cámara de Diputados diera media sanción al proyecto para “incentivar” la exploración de hidrocarburos a través de subsidios impositivos, el ARI volvió a cuestionar la iniciativa oficial que todavía debe refrendar el Senado. “(Néstor) Kirchner hizo lo mismo que (Carlos) Menem: aprobó la ley para llevarla como trofeo a Estados Unidos para adornar su viaje”, insistió Macaluse en referencia al viaje presidencial a los Estados Unidos en busca de inversiones.

El proyecto prevé la conformación de una comisión bicameral compuesta por doce diputados e igual número de senadores, cuyo trabajo se extendería por un año. La misma deberá convocar en forma “consultiva” a ONG, consejos universitarios y especialistas de “acreditada experiencia” en el tema, con el objeto de investigar las actividades petroleras y “detectar la eventual comisión de ilícitos”, además de “establecer una política de Estado sobre esos recursos estratégicos”.

Los legisladores del ARI quieren revisar los negocios petroleros desde la década menemista, que “transformó la estructura global del sector, abandonando a los intereses privados la explotación del recurso a su máximo nivel, con inversiones mínimas; frente a un Estado ausente y desertor de sus obligaciones”, dice el proyecto.