Fue un paso más hacia la alianza de los ingenieros. El diputado en uso de licencia Mauricio Macri recibió en su casa a Juan Carlos Blumberg, con el que empezó a acercarse a una definición: el padre de Axel ubicará un legislador en los primeros cinco lugares de la lista de legisladores de PRO, lo que sumará otro condimento a la polémica de las listas (ver aparte). Blumberg y Macri también acordaron “trabajar juntos” en la provincia, pero todavía el empresario no consiguió que su colega le diera el sí como candidato a gobernador por PRO. “El quiere que lo ayude, que me largue. Yo le dije que para mí es más importante la mesa de diálogo”, insistió Blumberg ante Página/12.

Al paladar de los macristas, lo que sellará el esperado acuerdo entre los ingenieros de la mano dura será la incorporación del legislador de Blumberg. Se trata del abogado Gerardo Ingaramo, uno de los principales asesores del padre de Axel en la Fundación. E incluso hay más en oferta si el ingeniero acepta finalmente el convite macrista: “Le vamos a dar espacio en la lista de la ciudad. Pero también se estuvo hablando de darle roles de gestión en caso de la victoria en la ciudad”, comentó un dirigente, que imagina a varios de los asesores de Blumberg desembarcando en los ministerios de Seguridad y de Justicia porteños. “Macri me está pidiendo que lo acompañe en la campaña. Lo vamos a ver, lo vamos a evaluar”, dijo Blumberg, como toda respuesta.

“El quiere que me largue. Yo le dije que es más importante tener políticas de Estado. El sabe que la gente me pide que sea candidato. Resolvimos tener reuniones periódicas”, contó el ingeniero, quien pese a todo cada vez se muestra más cerca de ponerse el traje de candidato. En el encuentro, que comenzó por la tarde y se prolongó por horas, se habló de conformar una “masa crítica Blumberg-Macri”, que pueda competir en Capital y en provincia. Y, eventualmente, en las elecciones nacionales.

La definición de Blumberg se viene demorando desde el año pasado, pero los macristas miran las encuestas y refuerzan su paciencia. El principal encargado de seguir la conformación de una alianza con Blumberg es el primo del empresario, Jorge Macri, a quien se menciona como posible acompañante en la fórmula. En el encuentro de ayer, el candidato a jefe de Gobierno de PRO se remitió a su primo para todo lo vinculado con el armado bonaerense.

La primera oferta que recibió Blumberg por parte del presidente de Boca (también en uso de su licencia) fue en el Hotel Sofitel, pocos días antes de que empezara el proceso por el secuestro y asesinato de Axel. Blumberg le pidió tiempo: hasta después del juicio. Luego le dijo que esperase hasta después de sus vacaciones. Después planteó que se decidiría a fines de marzo. Ahora ya no se pone plazos e insiste con la mesa de diálogo, a la que logró sumar a Ricardo López Murphy, Jorge Sobisch, Francisco De Narváez y Ramón Puerta.

El ingeniero soñaba con una incorporación por izquierda e intentó con el socialista Héctor Polino. “Hoy me contestó Polino. Me dijo que le encantaría participar, pero que pidió permiso al partido y le dijeron que participe después de las elecciones. Esto me demoró tres semanas”, se quejó Blumberg. La semana próxima tiene pensado llamar a todos los que le dieron el sí para acordar una fecha y comenzar. Incluso ya pensó en un lugar: unas oficinas en Reconquista y Bartolomé Mitre.

Los adláteres del líder de PRO no se desaniman. “A partir de hoy, hay un nuevo ‘nosotros’. Blumberg se suma al trabajo en conjunto. Lo que vamos a hacer es trabajar juntos en los temas de la provincia. Vamos a invitar a otros”, aseguró un dirigente cercano a Macri. Ya coordinaron para el 21 de abril: habrá un encuentro de equipos técnicos de Compromiso para el Cambio y de la Fundación Blumberg en Parque Norte.

Y lograron que el ingeniero comience a caminar la provincia, de forma muy parecida a lo que haría cualquier candidato. “Estoy visitando muchos lugares del conurbano. Y uno se va muy triste cuando uno ve en qué condiciones están: la gente que no tiene ni agua, con intendentes como Quindimil que está hace treinta años y habla todavía de postularse otra vez”, lanzó Blumberg a este diario. Para lanzarse, sólo falta un paso más.