Un incendio destruyó ayer parte de un edificio de la calle Lavalle al 2200 en el barrio porteño de Once, luego de que se prendiera fuego un depósito de cotillón de una empresa que no lo tenía habilitado. No hubo víctimas ni heridos entre los empleados, que evacuaron el lugar espontáneamente, pero cuatro vecinos debieron ser asistidos por principios de asfixia, entre ellas un niño. El incendio fue controlado cerca de las 19 por doce dotaciones de bomberos y los vecinos fueron asistidos in situ.

“Los vecinos fueron asistidos en el lugar y no necesitaron ser trasladados, salvo el niño, que fue llevado a un hospital pediátrico para su revisación”, explicó el director del SAME, Alberto Crescenti.

El local pertenecía a la firma Show Party S.R.L., que tenía habilitados para fines comerciales la planta baja y el primer piso del edificio, explicaron desde la Agencia de Control Gubernamental del gobierno porteño. El incendio comenzó pasadas las 15 en el depósito de esa distribuidora de artículos de cotillón que funciona en el edificio de Lavalle 2257.

Las llamas se extendieron rápidamente debido a que en el cuarto había gran cantidad de aerosoles de espuma, disfraces y productos de telgopor y papel. Doce dotaciones de bomberos debieron trabajar para controlar el incendio, que cerca de las 19 logró ser circunscripto, aunque persistían anoche focos menores en cuatro de los pisos del edificio.

La calle Lavalle permanecía anoche cerrada al tránsito, debido al peligro de derrumbe de una de las paredes del edificio, en el que también funcionaba un depósito de una textil, en el quinto piso, lo que contribuyó a alimentar las llamas.