Florencio Randazzo, ministro del Interior, tomó la posta y fue la voz que expresó ayer la opinión del Gobierno respecto de la prolongación del lockout patronal decidido por las entidades agropecuarias hasta la semana próxima. “Realmente, es injusto acusar a este gobierno de anticampo; lo que no- sotros no podemos hacer es aceptar un planteo de exigencia particular de un sector que está discutiendo su hiperrentabilidad, por encima del interés general”, señaló. El presidente de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, sugirió que “lo que tendría que hacer el ministro del Interior es estudiar matemáticas, lo digo con todo respeto, porque a los que sacaron de la cancha fueron a los pequeños y los medianos”.

“Si quieren cambiar el rumbo de la economía –completó Randazzo–, tienen que ir a elecciones e imponer ellos el modelo económico que creen que es mejor para la Argentina.” El ministro criticó la intención de los dirigentes rurales de “querer obligar a los intendentes y gobernadores a decir estás con el campo, con el pueblo, o con el Gobierno, arrogándose una representación política que no tienen”. Insistió en que el planteo ruralista es “antidemocrático” y ratificó la posición del Gobierno: “No estamos dispuestos a dialogar en esas condiciones, dure lo que dure” el conflicto.

También hubo expresiones de los funcionarios respecto de la anunciada reunión extraordinaria de obispos a la que llamó la Iglesia, ante lo que denominó “un clima de confrontación y de amenaza a la paz social”. Aníbal Fernández, ministro de Seguridad, respondió que “la Iglesia deberá apreciar que tiene necesidad de participar y lo está haciendo; uno no tiene más remedio que prestarle atención”. Randazzo, en tanto, sostuvo que si a la Iglesia le preocupan los pobres y la distribución del ingreso, “no me cabe duda de qué lado va a estar”.

Desde la provincia de Entre Ríos, el ministro de Gobierno, Adrián Bahl, advirtió que “hay dirigentes que lo único que buscan es mantener la situación de conflicto; para ellos, pareciera que cuanto peor estemos, será mejor su situación política”. En defensa del gobernador, Sergio Urribarri, que fue cuestionado por los dirigentes de la FAA de Entre Ríos por su alineamiento con el gobierno nacional, Bahl respondió que “lo único que lo condiciona es el bienestar de todos los entrerrianos, no los intereses de un sector, por más importante que sea, y que ni siquiera es damnificado, porque el agro ha sido el gran beneficiario de este modelo de crecimiento”.

Por su parte, la fundadora del movimiento Mujeres Agropecuarias en Lucha, Lucy de Cornelis, pidió a los dirigentes rurales que “depongan su actitud y terminen con todo esto, porque acá no es que el abandona pierde, acá perdemos todos los argentinos”. De Cornelis, refiriéndose a la gente de campo, llamó “a las mujeres, por sus hijos, que piensen en la paz, porque todos tienen derecho a tener la comida en sus mesas y la carne y la leche debe llegar a todos los hogares”. Recordó que “muchos productores salvaron sus tierras gracias a que pudieron refinanciar sus deudas con el Banco Nación”.