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“Hay alguien nuevo en la política: vos”, es el eslogan que encabeza una campaña medida al micrón por un ejército de asesores de Francisco de Narváez, que implica un despliegue de recursos sin precedentes. El candidato de Unión-PRO se extiende como un pulpo mediático en todas direcciones: está en los afiches, con spots en radio y televisión, pero también con mensajes en las radios de los pueblos más remotos. En Internet, tiene tres páginas Web y un grupo trabajando día y noche en las diversas redes sociales. Además, recorre diariamente tres distritos.

Con el despliegue que mostró hasta ahora, el dirigente de Unión-PRO ya sentó las bases para lo que vendrá. La principal diferencia es si en los próximos spots se aviene a incluir a su compañero de fórmula, Felipe Solá, hasta ahora ausente. No está claro tampoco si Gabriela Michetti accederá a una fotografía o spot conjunto. De momento, son dos campañas separadas.

El candidato contrató a los publicistas Fernando Guevara, Guillermo González Taboada, Ramiro Agulla y Carlos Souto. Pero en las oficinas cool de De Narváez en Las Cañitas trabajan otras 125 personas, que diseñan cada segundo de su exposición pública. El candidato toma clases de oratoria y teatro, filma video tras video y recorre distrito tras distrito. En los spots que ya lanzó se muestra descafeinado: se presenta como “hijo de inmigrantes” y asegura que hizo cada peso trabajando. Un segundo spot lo alterna con “votantes”, todos jóvenes, que dicen que la política “está llena de vivos, que nos llenan de muertos”.

Su equipo desarrolló un “Mapa de Medios”, con el que registran a los medios de cada pueblo bonaerense. De Narváez les envía mensajes grabados a las operadoras locales con propuestas concretas sobre cada pueblo. “No hay nada librado al azar”, suele decir el director de la campaña, Gustavo Ferrari, que comenta que De Narváez aparece en seis o siete radios por día “sabiendo previamente la realidad que rodea al barrio de esa radio”.

En Internet, además del “Mapa de la inseguridad” (con un 0800 que funciona las 24 horas), De Narváez tiene una cuenta en Facebook, donde hasta ayer contaba con 2988 partidarios. Hay tres personas dedicadas a responderles a todos sus “amigos” en esa red social. De Narváez fue uno de los pioneros de la campaña virtual en 2007, con su bunker en el mundo virtual Second Life, en el que ofrecía a los visitantes la posibilidad de asomarse al balcón de Perón. En su página Web, el candidato responde por video una pregunta por semana que votan los que ingresan. Esta semana, por ejemplo, aparecía una pregunta sobre su vinculación a la causa por tráfico de efedrina.

A las nuevas tecnologías, se suman los clásicos afiches y las recorridas cara a cara por los distritos bonaerenses (ayer estuvo en Isidro Casanova), para las que dispone de su jet personal. Cada visita incluye un trabajo previo, con sondeos de su imagen pública por parte de la Consultora Isonomía, y un informe de las necesidades de la zona que el candidato estudia religiosamente. La semana pasada canceló sus recorridas y se dedicó a responder sobre su vinculación con un presunto narcotraficante. Poco después, reanudó su máquina electoral y no la detendrá hasta 2011.