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El ministro de Seguridad bonaerense, Juan Pablo Cafiero, insistió en que la renuncia de Marcelo Sain fue una decisión personal tomada por el funcionario “para volver a su trabajo anterior”, que era un trabajo “con estabilidad” y aseguró que va a “tratar de impulsar algunos puntos” de su Plan de Modernización de la policía. Cafiero negó así que el apartamiento del viceministro haya estado vinculado con su intención de democratizar la fuerza, ni con las denuncias sobre el financiamiento policial del PJ bonaerense.
“El doctor Sain tuvo polémicas muy importantes sobre estos temas, que son temas de fondo, pendientes a resolver y de nuestro ministerio”, dijo Cafiero en declaraciones radiales, “pero (su alejamiento) no es porque si se va Sain desaparecen los temas”. Consultado sobre el proyecto de sindicalización de la Bonaerense, calificó la cuestión como “sin ninguna relevancia”.
El ministro elogió a su ex segundo, a quien describió como un “excelente colaborador” a quien trató de retener “obviamente porque es un funcionario muy importante, pero él tomó esta decisión y me la comunicó”. Al mismo tiempo, no ocultó su malestar en relación con las denuncias formuladas por Sain durante su gestión de seis meses. “Hay un tiempo para hacer diagnósticos que son importantes. Sin embargo, cuando ingresamos a la gestión ya no hacemos más diagnósticos, ahí tenemos que gestionar. Entonces, no podemos seguir actuando desde la denuncia. En estos seis meses fortalecimos toda el área de asuntos internos y llevamos adelante sumarios de investigación mucho más profundos de lo que se conoce, con los que separamos de la fuerza policial a verdaderos delincuentes de uniforme”.
Aunque la renuncia de Sain fue aceptada el sábado, ayer en el Ministerio de Seguridad todavía no tenían una fecha definida para la asunción del sucesor designado, Alejandro Almada. “Es un nombramiento provisorio”, adujeron.
Almada ya integraba el staff de Seguridad como secretario legal y técnico, cargo que asumió en julio pasado. Abogado de profesión, conoce y colabora desde hace años con Cafiero, de quien fue asesor en el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. En La Plata lo describen como con amplia experiencia en administración pública, impulsor de un recorte de gastos burocráticos valorado en el Ejecutivo y bajo perfil.
Cafiero negó que la salida de Sain responda a que su propuesta incomode en un año electoral. “El gobernador (Felipe Solá) ha respaldado permanentemente al ministerio todos estos meses”, dijo.
Sobre la agremiación de los uniformados, consideró que éste no es el tiempo adecuado para tratar el proyecto. “No quiero que a la sociedad, en un momento que percibe que la seguridad no anda bien, le agreguemos un factor de debate que realmente no tiene ninguna relevancia. Y que la gente puede llegar a interpretar como un agregado de inseguridad, porque va a preguntarse ¿y si el sindicato declara una huelga en medio de una ola de inseguridad, de secuestros, robos, asesinatos? ¿Eso significa que la policía no va a salir a la calle a defenderme? Bueno, creo que esa es la pregunta que se va a hacer la gente. No va a haber respuestas para esta pregunta, y como no va a haber respuestas, entonces no hay que introducir un debate que lo único que va a generar es una incertidumbre en la sociedad”.