La UCR de Mendoza jugó la última carta que le quedaba para tratar de evitar el arrastre de votos de Cristina Fernández. La fórmula Roberto Iglesias-Juan Carlos Jaliff le pidió a la Junta Electoral que le permita ir al cuarto oscuro con una boleta para las categorías nacionales y otra distinta para las provinciales. “Lo que estamos pidiendo es que el tramo nacional vaya separado del tramo provincial”, aseguró a Página/12 César Biffi, presidente del Comité radical mendocino. El argumento que esgrimen los radicales para despegarse de la candidatura de Ricardo Alfonsín es que resulta necesario “darle mayor importancia” a la elección de gobernador porque “en la primaria ya se eligió presidente”.

El resultado del 14 de agosto fue un cimbronazo para el candidato radical en Mendoza. Los 35 puntos de diferencia entre Cristina Fernández, que sacó el 46,94 por ciento, y Alfonsín, que obtuvo el 11,92, obligaron a Iglesias a repensar toda su estrategia con el objetivo de limitar el impulso que las nacionales le podrían traer al candidato peronista, Francisco “Paco” Pérez. Lo primero que hizo fue lanzar el jingle “Cortá boleta”. Luego intentó acuerdos para sumarse en las boletas de Eduardo Duhalde, Hermes Binner y Elisa Carrió. Como no pudo adherir su candidatura a la de otros presidenciables, ahora Iglesias realizó el planteo judicial para ir con boleta corta. Es decir, de gobernador hacia abajo por un lado, y la de presidente, vice y diputados nacionales, por el otro.

Según las encuestas que manejan en la UCR local, Iglesias –que fue gobernador de 1999 a 2003– tiene buena intención de voto, pero es perjudicado al simular el voto en el cuarto oscuro con la sábana completa. “Conscientes como somos de que la elección de gobernador siempre fue muy importante, no queremos que no haya libertad de elección, en el sentido de que se elija presidente pero también un gobernador”, explicó Biffi.

La actitud de los mendocinos generó mucho malestar en el alfonsinismo. A diferencia de distritos como La Pampa o Entre Ríos, donde los frentes provinciales pidieron previamente a la Justicia que los habilite a pegar su boleta a Binner y Carrió, en Mendoza sólo pueden ir con la lista de Alfonsín. “La sociedad ya sabe cortar boleta. Esto que hizo Iglesias suele aparecer para la gente como una actitud muy mezquina”, había dicho el alfonsinista Miguel Bazze al conocerse el jingle de campaña de Iglesias. El titular del Comité Nacional, el mendocino Ernesto Sanz, había salido a defender la actitud de su comprovinciano y desde el alfonsinismo volvieron al cruce. Fue el ex diputado Juan Manuel Casella quien les advirtió que, en caso de ganar, Iglesias “necesitará el respaldo de un fuerte partido nacional para adoptar decisiones autónomas en defensa de su provincia”. Las advertencias de los alfonsinistas no parecen tener demasiado efecto.